El problema de la capacitación en temas novedosos está presente en muchas áreas no sólo en el de las tecnologías de la información. El tema central es que ésta, ha producido un cambio social y cultural cuya racionalidad es por naturaleza relativo a otros paradigmas no trabajados en los centros de información y formación en los que los hombres de derecho cultivan su conocimiento. El trabajo es arduo quienes transmiten los conocimientos y forman profesionales, no contemplan siquiera la posibilidad de poner en el mapa de sus saberes los paradigmas de los tiempos que están corriendo. Hace apenas poco más de una década y media el desarrollo informático en la justicia casi no existía, sólo un puñado de jueces en todo el país se animaba a poner computadoras. Ni hablar de sistemas de gestión o servicios de justicia digital. Todos somos parte de este lento desarrollo. Es necesario trabajar fuertemente desde la formación de profesionales del derecho en este y otros temas cuyas conflictivas hacen al bienestar de la sociedad.