En España se dictó la primera condena penal por injurias a través de redes sociales. Se trata de un usuario de Twitter que insultó a la delegada del Gobierno español en Madrid. Pese a que los abogados de la damnificada solicitaron una pena de cuatro años de prisión, la Justicia resolvió imponerle una multa y el pago de una indemnización.
El 18 de mayo de 2012 un usuario de Twitter, conocido como Ximicomix realizó una convocatoria por esa red social y también por Facebook, para realizar un “twit-ataque” contra la delegada del Gobierno español en Madrid, Marta Cifuentes, bajo el lema “calla p****, no tienes dignidad”.
La funcionaria denunció el hecho ante las autoridades, y eso fue el inicio de la investigación que concluyó con la primera condena penal por un caso de injurias vía redes sociales. El usuario de la cuenta deberá pagar 300 euros de multa, 1.000 euros de indemnización y las costas del juicio, luego de que el juez en lo Penal n°24 de Madrid haya homologado el acuerdo entre los abogados de la funcionaria y los del imputado, pese a que inicialmente la querella solicitó una pena de cuatro años de prisión de cumplimiento efectivo.
Según informan los medios españoles, durante la audiencia de vista entre ambas partes, el acusado, un joven de 24 años denominado en el caso con las iniciales L.J.M, , reconoció los hechos que le fueran imputados, y pidió perdón expresamente a la ofendida. La sentencia además deberá ser publicada en las mismas cuentas de las redes sociales que sirvieron como medio para cometer el delito, para luego cerrarlas. Igualmente, se aclaró que podía abrir nuevas cuentas “y será responsable de lo que ponga a partir de ahora en ellas".
España es pionera en imponer sanciones a las manifestaciones en foros y redes sociales, además de este caso, en 2013 se había condenado en Badajoz a un ciudadano catalán que insultó en un foto de internet al presidente de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago. En esa oportunidad, se le impuso una multa de multa de 2.555 euros y la obligación de resarcir al funcionario por el rubro daño moral por otros 2.500 euros.
Este año también fue condenada la twittera Alba González Camacho a un año de prisión en suspenso por enaltecimiento del terrorismo por difundir “mensajes de contenido ideológico de elevado carácter radical y violento”, como instar pegarle un tiro en la cabeza a Mariano Rajoy, presidente del Gobierno de España.