Luego de una audiencia que se vio varias veces interrumpida por sucesivos pedidos de recusación contra el presidente del Tribunal Oral Federal 5, Luis De Renzi, el ex juez habló pero no contestó preguntas.
Golpeando la mesa y alzando la voz, Bernasconi dijo que en el proceso oral no se piensa en “cuál es la verdad” sino en “cuál va a ser el número de la pena”.
Al cargar contra los miembros del TOF 5, Bernasconi les advirtió que “no se pueden extraer conjeturas a partir de simples denuncias” y remarcó que “le han dado credibilidad a la denuncias de estas prostitutas que llevaron a las 3 de la mañana a un juzgado a declarar”, dijo, en referencia a Samantha Farjat y Natalia De Negri.
“Había que matarlo a Bernasconi”, aseguró el ex juez, y dijo que la justicia federal “funciona como una corporación porque (el ex juez Gabriel) Cavallo y (el juez Juan José) Galeano fueron dos soldados al servicio del poder político”.
Cavallo fue el juez que gestionó la búsqueda de Bernasconi en Brasil, donde estuvo prófugo de la justicia durante varios meses, hasta que fue capturado y extraditado en julio de 2000.
Bernasconi esta siendo juzgado por haber “armado” una causa judicial para involucrar por tenencia y tráfico de drogas personajes mediáticos, como el manager de Diego Maradona, Guillermo Coppola y el ex futbolista Alberto Tarantini.
El escándalo, que trajinó las pantallas televisivas bajo el título de “Caso Coppola”, tuvo su primer capítulo con el juicio oral que terminó en las condenas de los policías Daniel Diamante, Antonio Gerace y Carlos Gómez y el secretario judicial de Bernasconi, Roberto Schlagel.
Además, en su descargo Bernasconi aseguró que la Secretaría de Inteligencia del Estado sabía que se iban a realizar los procedimientos contra Tarantini y Coppola. “Ahora, ambos son querellantes contra Bernasconi en este juicio.
Bernasconi cargó en particular contra el presidente del Tribunal, Luis Di Renzi, y aseguró que este magistrado ya opinó sobre él en las condenas a Schlagel, Diamante y Gerace “y no se va a desdecir”. En esa resolución, el tribunal entendió que Bernasconi no podía desconocer las irregularidades por las que fueron encarcelados sus colaboradores.
Por eso, antes del descargo del ex juez, su defensora oficial, Fabiana León, recusó al juez Di Renzi y pretendió que el juicio se suspenda para que la Corte Suprema entendiera en el incidente. Esto obligó al tribunal a detener dos veces la audiencia, y finalmente se rechazó el pedido por “extemporáneo”.
El tribunal, integrado además por Guillermo Madueño y Juan Torino, basó el rechazo al pedido defensista basándose en un fallo de la Cámara de Casación que había respaldado su continuación en ese puesto.
El momento de mayor tensión durante los 40 minutos de declaración de Bernasconi se vivió cuando –luego de desoír los pedidos del tribunal para que bajara la voz-, el juez Di Renzi le dijo que si quería que se conociera la verdad, prestara declaración indagatoria, a lo que el ex juez contestó: “lo voy a hacer más adelante”.
También, Bernasconi intentó “despegarse” de la acusación a sus ex colaboradores asegurando que “los policías habrán cometido delitos”, aunque los trataron “con saña” como si “hubieran matado a la madre Teresa de Calcuta”.
Tras el descargo de Bernasconi, se comenzaron a leer las declaraciones indagatorias de Bernasconi durante la instrucción de la causa. Luego, el juicio pasó a cuarto intermedio hasta mañana a las 14 horas, cuando comenzarán las primeras declaraciones testimoniales.
Según adelantaron fuentes judiciales, mañana está previsto que declaren tres allegados a los querellantes en la causa, que son a su vez sus abogados: Alejandro Melik, Mariano Cúneo Libarona y Elena Rombolá.