El lunes de la semana pasada, Esso había pedido a la justicia francesa que acabara con lo que considera un ultraje de su marca en el sitio de Internet y solicitó una multa de 80.000 euros (77.600 dólares) diarios.
El grupo ecologista había comenzado una campaña contra la compañía petrolera titulada "stopesso" con el objetivo de "informar a la opinión pública francófona de la estrategia perversa de Esso, que trata de sabotear el protocolo de Kioto sobre el cambio climático".
La organización no gubernamental explicó que utilizó la versión modificada del logotipo de Esso "para subrayar cómo, para la multinacional, los dólares priman sobre el interés general".
Greenpeace consideró que después de haber financiado la campaña de George Bush a la Presidencia de Estados Unidos, ExxonMobil (matriz de Esso) instó a la administración de ese país a no ratificar el Protocolo de Kioto, sobre la reducción de las emisiones de gases responsables del "efecto invernadero".