Para el fiscal, Bernasconi es autor del delito de “falsedad ideológica de instrumento público” en siete oportunidades, por alterar actas de allanamiento y detención en causas donde se acusaba por tráfico y consumo de drogas a miembros de la farándula artística y deportiva. También, pidió que se lo condene a diez años de inhabilitación para ejercer cargos públicos.
Rizzi indicó que Bernasconi “firmó cada acto a sabiendas de su falsedad”. En un alegato de cinco horas ante el Tribunal Oral Federal 5, el fiscal dijo que Bernasconi “quiso convertirse en un adalid para la sociedad y se valió de su investidura como juez para cometer todo tipo de abusos”.
De cualquier forma, indicó que “si el objetivo eran Guillermo Copolla y Diego Maradona, qué escasas ambiciones se tenían en la lucha contra el narcotráfico”.
El representante de Maradona es uno de los querellantes en este juicio contra Bernasconi, pero sus abogados, Mariano Cúneo Libarona y Alejandro Melik no sólo no alegaron sino que ni siquiera se hicieron presentes. Esto a pesar que el mismo manager de Maradona dijo que “no le desea el mal a nadie”, pero recordó que el ex juez lo “privó de su libertad”.
Por la mañana, alegó la abogada de Tarantini, Elena Rombolá, quien consideró que Bernasconi era el “jefe” de la asociación ilícita y pidió 10 años de prisión. Para la abogada, el destituido magistrado encabezaba “un plan orquestado, preordenado y perverso” para perjudicar a Tarantini y otros futbolistas.
Tras el alegato fiscal de hoy, sólo resta el de la defensora oficial de Bernasconi, Fabiana León, que está programado para el próximo lunes. El martes serán las réplicas de los acusadores y –en una fecha aún no definida- se conocerá la sentencia.