La Corte Suprema de la Provincia emitió una resolución en la que solicita medidas para ahorrar energía. Ordena a los jueces apagar computadoras, abrir las ventanas y pintar las paredes de colores claros.
Mediante la resolución 33/16, el Superior Tribunal de Justicia de la provincia de Buenos Aires, ante "la situación actual de emergencia del Sector Eléctrico Nacional”, ordenó a los magistrados "aunar esfuerzos en todos los ámbitos para el efectivo cumplimiento de las medidas integrales en pos del uso racional y eficiencia energética”.
El Alto Tribunal solicitó "maximizar el uso de luz natural, apagar las luces encendidas en oficinas, baños y todo otro ambiente del organismo o dependencia en ausencia de personal, como así también, al finalizar la jornada laboral, durante la noche, días festivos y fines de semana". Además "proseguir con la instalación de lámparas de bajo consumo, realizar la limpieza y el mantenimiento periódico de artefactos y lámparas, para conservar su eficiencia original".
Asimismo, la Corte provincial recomendó "mantener y utilizar colores claros para el pintado de muros y cielorrasos, dado que ello coadyuda a mejorar las condiciones de luminosidad". Al mismo tiempo, "restringir la iluminación de halls, en pasillos comunes y los ornamentales de los edificios, sin que se resienta la seguridad de dichos lugares".
Sobre los sistemas de climatización, la resolución dictaminó "hacer un manejo racional de aventamientos, celosías, toldos y demás recursos disponibles. Como así también "establecer para los aires acondicionados como temperatura mínima en época estival 25° y un rango de entre 20° y 22° en época invernal" y prescindir su uso ante la ausencia de personal.
En cuanto a las computadores, indicó apagarlas de manera completa "incluyendo monitor, impresoras y scanner, al finalizar la jornada laboral, debiendo extremarse tal recaudo en la jornada anterior al comienzo de los días festivos y fines de semana".
Lo mismo aplica para las fotocopiadoras, que deben configurarse en "modo ahorro de energía" durante el horario laboral y apagarse en forma completa al finalizar la jornada de trabajo.
Se estableció también reducir el funcionamiento de ascensores en servicio en aquellos edificios donde "la cantidad y la distribución lo permita después de las 15 horas", y "propiciar la finalización de las tareas de limpieza antes de las 18 horas".