La Cámara Civil confirmó una sentencia de grado que hizo parcialmente lugar a la demanda interpuesta por una mujer contra un centro comercial y a su aseguradora por la caída que sufrió al engancharse el pie con una perchero que no tenía las trabas de seguridad colocadas. Por el hecho, los demandados deberán pagar 280 mil pesos.
En los autos “P. C. I. c/ Falabella S.A. y otros s/ daños y perjuicios”, la Cámara Nacional de la Apelaciones en lo Civil confirmó la sentencia de grado que hizo parcialmente lugar a la demanda y así condenó a un centro comercial y su aseguradora a pagar $280.100 por la caída que sufrió una mujer al engancharse el pie con una perchero que no tenía las trabas de seguridad colocadas.
La actora relató que “se encontraba en compañía de su hija realizando compras en el local de ropa femenina ubicado en Falabella S.A. y en el instante en que encuentra una prenda de su agrado, giró con el objetivo de llamar a su descendiente, enganchando el pie con un perchero que no tenía las trabas de seguridad colocadas, por lo se deslizó contra su cuerpo, empujándola y perdiendo su estabilidad ocasionando finalmente su caída”.
Además señaló que “fue asistida en el lugar por el servicio médico contratado por el establecimiento, y que luego fue trasladada en una ambulancia hasta una clínica, donde se le diagnosticó fractura de fémur derecho en tercio proximal, con desplazamiento multifragmentario”.
Por su parte, la demandada negó los hechos denunciados en la demanda al alegar que “el mobiliario es de estructura de caño pintado y un frente con acrílico, que no tiene ruedas sino tapines”, y afirmó: "La actora se cae producto de que una pierna se le habría puesto dura y no podía moverla”.
De este modo, los jueces explicaron que una testigo relató que “la señora estaba de espalda y gira se trastabilla y se engancha el pie con un perchero, todos los percheros tenía ruedas y el perchero se desplaza y la señora cae”.
Asimismo, los sentenciantes explicaron que preguntada la dicente sí observó algún cambio mobiliario en el sector visitado, luego del accidente sufrido por la accionante, respondió: “los percheros no tienen más ruedas sino patas fijas. Pero las mesas con exhibición de mercadería siguen teniendo ruedas, donde están las ofertas y el piso sigue siendo el mismo de porcelanto, no fue cambiado”.
Sobre este punto, los magistrados consignaron que “la queja de la demandada en punto a que no fue considerado el informe del accidente elaborado por personal del local, diré que dicho documento por sí sólo resulta insuficiente a los fines pretendidos, teniéndose en consideración que resulta ser una mera manifestación unilateral”.