De esta forma, será la Cámara Federal la que resuelva el futuro del ex juez en esta causa, al revocar o confirmar el procesamiento dictado por Bonadío.
Para el titular del Juzgado Federal 11, el destituido magistrado mendocino incurrió en el delito de “concusión”, figura penal contemplada en el artículo 266 del Código Penal, que prevé penas de uno a cuatro años de prisión e inhabilitación especial por un período similar a quien “abusando de su cargo, solicitare, exigiere o hiciere pagar o entregar indebidamente, por sí o por interpuesta persona, una contribución, un derecho o una dádiva”.
En mayo último, Leiva fue beneficiado en este causa con la eximición de prisión bajo promesa de no eludir la acción de la Justicia, y el 20 de junio fue indagado por Bonadío, en una causa donde intervienen además el secretario Diego Agüero y el fiscal Claudio Navas Rial. La semana pasada, Bonadío decidió procesar al ex juez.
La causa se inició por denuncia de Moneta, quien dijo que Leiva, a través de terceros, le habría reclamado una suma de dinero (que algunas fuentes estiman en el orden de los tres millones de pesos) para no detenerlo, en el marco de la investigación por el supuesto vaciamiento del Banco de Mendoza.
Pero el pleito fue resuelto finalmente por la Corte Suprema de Justicia, que envió la causa al fuero federal de la Capital, donde se dejó sin efecto la orden de captura contra el banquero, que se mantuvo en condición de prófugo de la justicia por algunos meses.