La Procuración Penitenciaria presentó un nuevo informe estadístico acerca de la población alojada en los establecimientos del Servicio Penitenciario Federal. Según los datos oficiales, al finalizar el primer semestre del año 2016 la tasa de ocupación alcanzó el 98% de la capacidad operativa del sistema.
La Procuración Penitenciaria de la Nación publicó su boletín estadístico con información actualizada al segundo trimestre de 2016 sobre la población alojada en los establecimientos del Servicio Penitenciario Federal (SPF), y sus características especiales.
Según el informe, en Argentina “las cárceles federales han funcionado durante los últimos años con una ocupación cercana al 90% de su capacidad de alojamiento declarada”, y destacó que “al finalizar el primer semestre del año 2016 la tasa de ocupación ha alcanzado, de forma alarmante, el 98% de la capacidad operativa del sistema”.
Sobre dicha cuestión, la Procuración subrayó que el análisis del fenómeno desde un enfoque trimestral permite “identificar varios ejemplos de las estrategias de ocultamiento y desinformación con que las autoridades penitenciarias enmascaran la situación en la que se encuentran los centros penitenciarios que funcionan bajo su órbita”.
De este modo, el organismo explicó que a partir de febrero el SPF “dejó de informar en sus registros oficiales la ‘capacidad real’ -cifra referida a la cantidad de plazas disponibles para el alojamiento- y comenzó a indicar sólo la ‘capacidad general’ que contempla el total de plazas en cada establecimiento, incluyendo celdas o pabellones clausurados o inhabilitados”.
“Por ende, a pesar de lo que indican las cifras publicadas, no se produjo un aumento efectivo en la capacidad de alojamiento, sino que se manipuló la información, omitiéndose la publicación de los datos certeros”.
Por otro lado, manifestó que “a partir del mes de septiembre de 2015, la administración penitenciaria volvió a adulterar estas cifras, al incorporar como plazas propias las ubicadas en la cárcel provincial de Senillosa, Neuquén, disponibles a raíz del convenio de alojamiento celebrado entre el SPF y el servicio penitenciario de esa provincia”.
“Si bien ya existían otros convenios de esta índole con otras provincias, no obstante y hasta este momento, esos espacios no eran informados como capacidad propia. Su inclusión no fue desinteresada puesto que la contabilización de estas 200 plazas permitió reducir las cifras relativas a la ocupación del SPF por debajo del 90%, por primera vez en los últimos cuatro años”, destacó el informe.
Asimismo, el documentó indicó que “durante el segundo trimestre de 2016, las mujeres alcanzaron el 7% de las personas alojadas en el SPF , y los jóvenes adultos el 4%”, y concluyó: “Es importante que la política penitenciaria despliegue programas tendientes a atender las especificidades propias de cada uno de estos colectivos a los efectos de que su encierro se desarrolle en un contexto respetuoso de sus derechos y necesidades particulares”.