Moussaoui es un ciudadano francés de 34 años que está detenido, sospechado de ser uno de los conspiradores que colaboraron con los 19 secuestradores de los aviones usados para atacar las Torres Gemelas de Nueva York y el Pentágono.
Además, un equipo de abogados de oficio solicitó un plazo de dos meses para tener el tiempo necesario si la juez le retira a Moussaoui el permiso de defenderse a sí mismo.
La fiscalía dijo por su parte en una moción presentada esta semana que deseaba que el proceso se iniciara conforme a lo planeado, al señalar que las víctimas y el público merecen una solución pronta del caso.
En ese sentido, consideraron que “un retraso sería contrario a una ley que demanda procesos rápidos” y agregaron que “los atentados del 11 de septiembre formaron parte de una guerra declarada contra Estados Unidos...con el fin de aterrorizar a todo el país”.
El acusado, ha manifestado que, por su confinamiento, no puede ponerse en contacto con testigos y que todavía no tiene la aprobación para tener acceso a computadoras o revisar los documentos presentados por los fiscales.
Los abogados designados por la corte dicen que necesitan de más tiempo debido al gran número de documentos del caso, muchos de ellos secretos. Mientras los abogados tienen permiso para ver esos documentos, Moussaoui no puede y el gobierno se niega a darle acceso a ellos.