Lo resolvió el Fiscal de Instrucción de Lucha contra el Narcotráfico de Cruz del Eje, Raúl Ramírez, en relación a una imputada por el delito de comercialización de estupefaciente agravado, más conocido como "narcomenudeo", quien se encontraba en prisión preventiva. La domiciliaria que favorece a LYL es debido a que su hija de doce años padece un “leve retraso mental”, por lo que el fiscal decidió aplicar los parámetros de la Ley de Ejecución Penal, que autoriza a otorgar la prisión domiciliaria en caso de madres con hijos menores cinco años y con discapacidad, pese a que en el caso los presupuestos no encuadraban taxativamente en esa regla. En su dictamen, el fiscal Ramirez invocó el interés superior del niño "ya que podrá estar contenido por su madre y mantener el vínculo materno-filial", además de que se aseguran los fines del proceso.