La Cámara Civil, Comercial y Laboral de Venado Tuerto responsabilizó a una empresa agropecuaria por las lesiones que sufrió un empleado mientras trabajaba ordeñando vacas.
En los autos "T. M. S c./ A. J. R. y otro s/ juicio ordinario – daños y perjuicios", la justicia de Venado Tuerto, provincia de Santa Fe, hizo lugar a la demanda por daños y perjuicios interpuesta por un trabajador rural que sufrió lesiones mientras trabajaba entre una manada de vacas.
El hombre realizaba tareas de ordeñe cuando una vaca del rodeo lo lesionó al empujarlo contra la puerta del caño del tambo mecánico.
Los integrantes del Tribunal entendieron que los trabajos de tambo y ordeñe, en medio de una tropilla de vacas implica una potenciación del riesgo, que pueda producir un evento dañoso.
En ese sentido, los jueces especificaron que "el concepto de cosa peligrosa involucra a las cosas que se hallan movidas por una fuerza sobre la que el hombre no tenga control absoluto; los mecanismos que multiplican la fuerza humana; las cosas que, en combinación con otras cosas o con los accidentes de la naturaleza, provocan daños y las cosas que modifican el medio ambiente natural, produciendo humo, olor, luminosidad, humedad, ruidos, vibraciones, radiaciones".
Los magistrados sostuvieron que era responsabilidad de la empresa empleadora el deber de custodia y de seguridad técnica sobre los medios de locomoción y trabajo rural de los que se vale. Es decir, debió actuar como guardián del trabajador afectado.
Por ese motivo, los camaristas condenaron a la empleadora a abonar la suma de $ 80.000,00 en concepto de daño material; la de $ 40.000,00 en concepto de daño moral; la de $ 10.000,00 en concepto de lesión estética; la de $ 20.000,00 en concepto de daño psicológico y la de $ 4.320,00 en concepto de gastos terapéuticos futuro.