El Juzgado Federal N°4 de Rosario, a cargo de Marcelo Martín Bailaque, procesó a a un joven de 18 años, en orden al delito de amenazas anónimas, por haber realizado un llamado telefónico con una falsa amenaza de bomba al colegio donde cursaba. Según consta en la causa, el establecimiento educativo recibió una llamada anónima en la cual una voz masculina le refería respecto a la existencia de una bomba en el edificio. Ello alarmó a personal y alumnos del Instituto, y se convocó a personal de la Delegación “Rosario” de la Policía Federal Argentina, que revisó el lugar sin encontrar explosivo alguno. De este modo, el juez consideró que “el imputado habría realizado el llamado intimidatorio al establecimiento educativo al que concurría a los fines de evadir el examen que estaba programado para esa fecha".