El Senado rechazó el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), que contaba con media sanción de Diputados. La iniciativa no se podrá volver a tratar hasta marzo de 2019. Las voces en contra y a favor en la Cámara alta.
Por 38 votos en contra y 31 a favor (2 abstenciones y 1 ausencia), la Cámara de Senadores de la Nación rechazó en la madrugada del jueves por mayoría el proyecto de ley de Interrupción Voluntaria del Embazaro (IVE), que contaba con media sanción de Diputados, y no podrá volver a tratarse hasta el próximo año.
En una sesión histórica que arrancó cerca de las 10 de la mañana y finalizó a las 2.20, se anotaron 64 oradores, con 10 minutos cada uno para hablar, ganó la postura en contra del proyecto para legalizar el aborto en Argentina. El país no podrá sumarse al grupo de naciones que ya legalizó la práctica gratuita en hospitales públicos.
El primero en tomar la palabra fue Mario Fiad, como miembro informante y presidente de la Comisión de Salud, y expresó su clara postura en contra al sostener que "el derecho a la vida está por convertirse en el más débil de los derechos”.Agregó que este tema “nos atraviesa horizontal y verticalmente como sociedad, nos interpela desde la tragedia que significa el aborto y que pone en tensión derechos que son fundamentales”.
Uno de los discursos mas encendidos fue el del misionero Humberto Schiavoni, quien resaltó que “despenalizar no es suficiente, el aborto seguro no tiene que ser un recurso para quienes tienen un mayor poder adquisitivo. Este es un debate que no tiene marcha atrás, si hoy no se aprueba, la sociedad va a avanzar en este sentido en los próximos años”.
El legislador señaló que el proyecto “es claramente violatorio de la Constitución Nacional” y de los tratados internacionales “suscriptos por nuestro país; también de las normas legales sancionadas". Agregó que en dichas normas se reconoce “a la persona por nacer como sujeto de derecho” y al “derecho a la vida desde la concepción”.
Un debate seguido por miles en la plaza
A su turno, el presidente de la Comisión de Legislación Penal, Pedro Guastavino, destacó que inicialmente él estaba en contra del aborto legal, pero al cabo del debate que se dio en ambas cámaras comprendió que “la única forma de entender esto es desde el lado de la salud pública”.
El entrerriano señaló que “prácticamente se eliminan las internaciones por abortos con complicaciones y con ello los recursos destinados a este supuesto“ y "por sobre todo se eliminan las muertes maternas por complicaciones”.
Dalmacio Mera, titular de la Comisión de Asuntos Constitucionales, destacó que la ley de interrupción voluntaria del embarazo “no resuelve el problema de la clandestinidad” de esta práctica y puso en duda la constitucionalidad de la ley.
Mera enfatizó en la disyuntiva legal que existe alrededor del inicio de la vida y sostuvo que “no pudo escuchar qué sustancia mágica, qué proceso biológico se produce en la semana 12 o 14 para que una vida valga más o menos a partir de ese momento preciso”.
“No hay forma de decirle a un médico que hasta el día de la semana 14 tiene que practicar la eliminación de ese feto, y el día después va preso”, sentenció el justicialista.
Uno de los discursos mas encendidos fue el del misionero Humberto Schiavoni, quien resaltó que “despenalizar no es suficiente, el aborto seguro no tiene que ser un recurso para quienes tienen un mayor poder adquisitivo”, agregó y sentenció que “este es un debate que no tiene marcha atrás, si hoy no se aprueba, la sociedad va a avanzar en este sentido en los próximos años”.
“¿Por qué no legislar para la mujer y para el niño por nacer, para que todos los argentinos en este país tengan su vida protegida?”, se preguntó la senadora Silvia Elías de Pérez, la principal figura de los antiabortistas.
Una hora antes, Cristina Kirchner indicó que no fue su hija, Florencia, militante feminista, quien le hizo cambiar de opinión, sino “los miles de chicas que salieron a la calle”. “Estamos rechazando un proyecto sin proponer nada alternativo. Y la situación seguirá siendo la misma”, dijo en referencia a las muertes por abortos clandestinos.
Después de la ex Presidenta, Miguel Pichetto formuló un discurso de corte anticlerical en el que rescató la decisión de Macri de haber permitido el debate, pero lo cuestionó por no ir a fondo “para que esta ley saliera”. Y les dijo a los antiabortistas: “Vencerán, pero no convencerán”.
En el cierre de la sesión, pasadas las 2 de la mañana, Luis Petcoff Naidenoff dijo después que, como católico, diferenciaba “la creencia del rol del Estado”, porque se formó “en un partido que tiene visión laica”.