El Ministerio de Seguridad y el Poder Judicial implementaron un protocolo para identificar falsas amenazas telefónicas mediante el sistema 911. Se abrirán causas penales y se investigará de dónde provienen los llamados.
Por la Cumbre de los líderes del G20, el Ministerio de Seguridad de la Nación, los ministerios públicos de Nación, provincia de Buenos Aires y Ciudad de Buenos Aires, conjuntamente con el Ente Nacional de Telecomunicaciones (ENACOM) y las empresas prestadoras del servicio de telefonía móvil, acordaron una serie de acciones para identificar las amenazas telefónicas.
La medida busca identificar de inmediato los números telefónicos y la ubicación de las personas que realicen cualquier amenaza falsa mediante el sistema de emergencia 911.
El sistema será implementado durante la cumbre de mandatarios que se realiza en la Ciudad de Buenos Aires entre el 29 de noviembre y 1 de diciembre. Sin embargo, las autoridades señalaron que el protocolo será también utilizado a futuro para combatir las denuncias falsas y bromas.
Cuando la línea de emergencias reciba una comunicación amenazante para las actividades del Encuentro de Mandatarios del G-20, se presentará inmediatamente una denuncia a la fiscalía de turno de la jurisdicción correspondiente.
La fiscalía le dará el trámite legal correspondiente, en el que podrá solicitar a la Dirección de Asistencia Judicial de la Corte Suprema de Justicia de la Nación (DAJUDECO) toda la información tendiente a identificar el origen y autoría de la llamada.
El organismo trasladará la solicitud a las compañías telefónicas, las cuales compilarán y proveerán el número telefónico, IMEI International Mobile Station Equipment Identity) y localización real.
"Serán rastreados, localizados y se les abrirá una causa. Quien lo haga, será procesado de manera inmediata", explicó la ministra Patricia Bullrich respecto al funcionamiento del protocolo especial para las falsas llamadas.
El sistema será implementado durante la cumbre de mandatarios que se realiza en la Ciudad de Buenos Aires entre el 29 de noviembre y 1 de diciembre. Sin embargo, las autoridades señalaron que el protocolo será también utilizado a futuro para combatir las denuncias falsas y bromas. Con esta decisión se busca ponerle un freno a la impresionante cantidad de llamadas “inconducentes” que se reciben en el 911.