Denuncias, fraudes y votos

Una nueva jornada democrática se llevó a cabo en el país, que ayer eligió a un nuevo presidente y, en algunas provincias, gobernadores y diputados nacionales. Como es habitual, sobrevolaron algunas denuncias que hablaban de un posible fraude electoral que, ante una justicia de reacción rápida, fueron desmentidas.

La primera polémica giró en torno al DNI con el que se podía votar, luego que el Ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, denunció a través de su cuenta de Twitter que muchas personas fueron a votar con un documento "no válido". "Nos llegan decenas de denuncias de nuestros fiscales en la Provincia de Buenos Aires, principalmente de los partidos de Merlo, La Matanza, Malvinas Argentinas, Pilar y Almirante Brown, de votantes que se presentan a las mesas con DNI anteriores a los que figuran en el padrón", sostuvo el funcionario.

Lo cierto es que todas las maniobras denunciadas durante la jornada fueron desestimadas. La única denuncia formal a la que se dará curso es a la presentada por los apoderados de Consenso Federal, que denunció la aparición de boletas truchas en varias comunas de Capital Federal.

Cambiemos denunció el hecho ante la Junta Electoral de la Provincia de Buenos Aires que minutos después emitió un comunicado afirmando que "no se impedirá el voto de aquellos que se presentan con tarjeta cuya leyenda diga 'no apto para votar', cualquiera sea el ejemplar que figura en el padrón". En el texto, firmado por el juez Adolfo Ziulu, se afirmó que "los ciudadanos pueden votar con documento igual o posterior al que figura".

Para Sebastián Schimmel, secretario de la Cámara Nacional Electoral las denuncias sobre el uso de documentos anteriores "no pasan de ser una anécdota en un conjunto de 100 mil mesas nacionales y no tienen ninguna incidencia en el resultado de la elección".

Lo cierto es que todas las maniobras denunciadas durante la jornada fueron desestimadas. La única denuncia formal a la que se dará curso es a la presentada por los apoderados de Consenso Federal, que denunció la aparición de boletas truchas en varias comunas de Capital Federal.

Según detallaron desde el partido que tenia a Roberto Lavagna como candidato a presidente, aparecieron en muchos cuartos oscuros boletas muy similares a las oficiales, pero con otro número de lista, lo que valía la impugnación del voto. “Es grave lo que está pasando en la elección de la ciudad.Demuestra que hay gente muy preocupada porque participemos”, escribió Matías Tombolini, candidato a jefe de gobierno en su cuenta de Twitter.

Días atrás, Schimmel había afirmado que "no hay ninguna clase de fundamento para dudar sobre la transparencia de las elecciones", ya que los comicios en el país tienen "una cantidad de reaseguros y de controles cruzados por parte de los partidos políticos". Las medidas de seguridad se traducen en la fiscalización por parte de las diferentes fuerzas que participan del proceso electoral, que van desde la confección del padrón hasta el recuento de los votos.

Smartmatic a segundo plano

En las PASO, la polémica giró alrededor del software propuesto por el Poder Ejecutivo para cargar los datos del escrutinio provisorio. Varias denuncias llevaron a la jueza federal con competencia electoral, María Romilda Servini, a designar un veedor judicial para evitar suspicacias. 

El jueves se conoció el informe del perito informático, perteneciente al Consejo de la Magistratura de la Nación, quien aseguró que la empresa había revertido los errores que demoraron la carga en las primarias de agosto. El veedor pidió que no se realice ningún cambio y detalló que el sistema era seguro para realizar la carga de los datos.

Finalmente, como estaba estipulado, a las 21 horas del domingo, como estaba estipulado, el Ministro Rogelio Frigero dio los primeros resultados que ya anunciaban como ganador a Alberto Fernández.