De este modo el alto cuerpo de justicia brasileño confirmó la sentencia que pesaba en contra de los periodistas Roberto Luiz Salum y Joao Batista Rosa Oliveir y el pescador Nilo da Silva.
Los hechos que terminaron en la justicia se dieron en septiembre de 1995, cuando los reporteros hicieron un informe sobre las ballenas francas que frecuentan las playas de Pinheiras, ubicada al sur del Brasil.
Pero los hechos que generaron el pronunciamiento del tribunal ocurrieron cuando el barco que tripulaban se acercó demasiado a uno de los cetáceos, que estaba junto a su pequeño ballenato.
El fuerte ruido de los motores del barco y la cercanía de los periodista, según testigos, “asustaron a las ballenas, que perdieron la orientación y acabaron encalladas en un banco de arena del que fueron rescatadas por otros pescadores que estaban trabajando en el lugar”.
En un primer momento, Salum, Oliveir y Da Silva, este último procesado por alquilar el barco, habían sido condenados en primera instancia a 6 años de prisión, pero gracias a las distintas apelaciones realizadas durante el proceso, lograron reducir la pena a un año y, finalmente, traducirla en trabajos comunitarios.