A partir de ahora, la Justicia porteña contará con una biblioteca digital que le permitirá a los jueces y fiscales acceder de forma virtual a las imágenes y fotografías de miles de cámaras. El sistema constará con un doble factor de autentificación a través de usuario, clave y token.
La Ciudad de Buenos Aires presentó la herramienta denominada "Biblioteca Digital", que permitirá poner a disposición de la Justicia las imágenes de las diez mil cámaras, con el objetivo de agilizar el trabajo de detección del delito.
La nueva herramienta digital fue presentada por el vicejefe de gobierno porteño, Diego Santilli, quien explicó que servirá para poner más rápidamente a disposición de la Justicia las imágenes de las más de 10 mil cámaras de seguridad, y también las del Anillo Digital.
Santilli explicó que “va a permitir resolver de forma delitos rápido y ágil”. Se trata de imágenes obtenidas por el Anillo Digital ubicado en los ingresos y salidas de la Ciudad, como también de las cámaras distribuidas en los diferentes barrios porteños.
“Es inaceptable la pérdida de tiempo cuando la seguridad está en juego. Los trámites burocráticos otorgan ese tiempo al delito. Con esta herramienta ahorramos diez y hasta quince días en la implementación de los oficios que la justicia requiere, y hasta millones de pesos en la compra de CD que ahora pasarán a la historia", dijo Santilli a la prensa.
Antes de este proyecto, los funcionarios judiciales debían solicitar al Centro de Monitoreo Urbano todas las fotos y videos. Tan sólo en 2019, la Justicia debió tramitar un total de 46.761 requerimientos, y la entrega y el retiro del material –en formato físico- tardaba alrededor de 10 días.
Para su instrumentación, según explicaron, se aplicará un doble factor de autentificación a través de usuario/clave y token.
Desde el Gobierno porteño señalaron que, a partir de ahora, el procedimiento será de forma virtual mediante un usuario y clave para el ingreso a la "Biblioteca Digital", lo que agilizará el proceso.
Se trata de un servicio de acceso a exportaciones de videos y fotos, controlado, auditable y restringido, que permitirá el acceso por un tiempo limitado para su descarga, visualización y utilización en los procesos judiciales.
Para su instrumentación, según explicaron, se aplicará un doble factor de autentificación a través de usuario/clave y token. También permitirá mantener las marcas de agua en las imágenes como medida de seguridad para evitar el uso indebido y posibles planteos de nulidad.