La Suprema Corte bonaerense presentó su informe anual de gestión sobre el servicio de la administración de justicia en el contexto de la pandemia. El documento reveló que durante el último año se efectuaron 30.146.440 trámites judiciales, lo que representa el 86% con relación al mismo período de 2019/2020.
La Suprema Corte bonaerense publicó un informe donde detalló los números del último año, correspondiente a la pandemia, y muestran que se realizaron en total 30.146.440 trámites judiciales, de los cuáles 19.307.135 corresponden a notificaciones y presentaciones electrónicas, superando en 2.992.865 las realizadas en idéntico ciclo de 2019/2020.
Se precisó que ingresaron en los distintos fueros e instancias 840.588 causas, lo que representa el 76% de las causas ingresadas en el mismo período de 2019/2020, y se iniciaron en forma completamente digital 446.930 nuevos expedientes. El soporte tecnológico permitió organizar la asistencia presencial de letrados y público a tribunales y juzgados, asignando 189.157 turnos por medio del Sistema de Turnos Judiciales (STJ).
En cuanto a la gestión a distancia y mediante teletrabajo, se realizaron 153.158 reuniones/audiencias virtuales y se otorgaron más de 14.000 credenciales de acceso remoto, alcanzando picos de 8600 magistrados, funcionarios y agentes judiciales conectados diariamente.
En los últimos 12 meses los Tribunales de Alzada, en todos los fueros, dictaron 103.607 sentencias y resoluciones, un 14% más de las dispuestas en el mismo ciclo de 2019-2020; los Juzgados de Primera Instancia dictaron 436.721 sentencias y resoluciones registrables, el 75% de las dispuestas en el mismo período del año anterior; y los Juzgados de Paz dictaron 80.168 fallos y resoluciones, el 87% de lo dispuesto en el mismo calendario.
En total, en el período relevado se dictaron 627.599 sentencias y resoluciones, lo que representa el 81,4% con relación al mismo ciclo del 2020-2021.
El documentó agregó que "las innovaciones implementadas exhiben, en datos objetivos, la franca superación de la parálisis generada al desatarse la pandemia, en marzo del año pasado", donde "en un entorno caracterizado por la persistencia de tan severa dificultad, el conjunto de medidas puesto en marcha, fruto del dialogo con los distintos sectores de la comunidad jurídica, ha logrado acrecentar progresivamente los niveles de la actividad prestacional".
"La crisis impone continuidad en las reformas, su evaluación y mejora, y la programación e implementación de aquellas que habrán de sucederlas. Todo con el norte puesto en la tutela efectiva de los derechos en la Provincia de Buenos Aires", concluyó.