En un nuevo aniversario del Ni Una Menos, Diario Judicial repasa las alarmantes cifras que muestran que los casos de violencia de género no cesan. En el último año 251 mujeres fueron asesinadas, lo que arroja un femicidio cada 35 horas
El 3 de junio de 2015 miles y miles de mujeres en todo el país se organizaron y salieron a la calle para pedirle al Estado la implementación de políticas públicas y el cumplimiento de las leyes que garanticen una vida libre de violencia. El detonante fue el femicidio de Chiara Páez, en Rufino, en manos de su novio. Tenía 14 años y fue enterrada en el patio de un familiar del acusado.
A seis años de ese hecho histórico, los números muestran que, si bien hubo avance en materia legislativa, política y judicial, la violencia y crueldad contra las mujeres y disidencias está lejos de terminar.
Los últimos números de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, a través del Registro Nacional de Femicidios de la Justicia Argentina, arrojó que 251 mujeres fueron asesinadas durante 2020. Del total de víctimas, 244 eran mujeres cis y 6 eran mujeres trans/travesti, mientras que para la víctima restante no se ha podido establecer. Es decir: un femicidio cada 35 horas.
Las cifras recrudecieron con el aislamiento social, preventivo y obligatorio dictado en el país a raíz de la pandemia por el Covid-19 y sucedió, principalmente, por la permanencia de las víctimas en el mismo lugar que su agresor. Esto puso en alerta nuevamente a los representantes de los poderes quienes debieron dictar medidas y trabajar articuladamente de manera improvisada.
Entre otras, el fuero civil decidió prorrogar de manera automática todas las medidas dictadas en causas de violencia de género (como órdenes de restricción, botones antipánicos y exclusión del hogar), según se iba extendiendo la cuarentena.
Desde la Defensoría General de la Nación (DGN) detallaron que se dedicaron a atender causas para garantizar el acceso a prestaciones y derechos de las asistidas por parte de otros organismos, entre ellas el cobro del IFE (Ingreso Familiar Extraordinario) y de la AUH (Asignación Universal por Hijo); realizaron una campaña de difusión destinada a que las mujeres y LGTBI supieran que el aislamiento no las obligaba a convivir con su agresor, además de la mencionada #NoEstásSola.
El organismo remarcó que en el último año se redujo el número de consultas y la asunción de nuevos patrocinios, pero eso no significa que el nivel de violencia haya disminuido. Por el contrario, "las consecuencias de la pandemia, como el aislamiento y la concentración de las tareas de cuidado, incrementaron el riesgo de violencia", detallaron.
En la medida que los femicidios no bajen no se puede hablar de políticas legislativas o judiciales totalmente efectivas. Como cada tres de junio, en Argentina se vuelve a entonar la misma consigna: Ni Una Menos, vivas nos queremos.