Las fuentes confirmaron que la maniobra consistiría en la renuncia masiva de trabajadores de la firma Jorsar (nombre legal de "André Kevin"), que luego pasaban a revistar en dos cooperativas de trabajo, para evitar el pago de aportes laborales.
En la investigación se concluyó que de 74 empleados que trabajaban en locales de la firma más de 50 indicaron pertenecer a la "Cooperativa de Trabajo Mobili" y otros 15 a "Anke Cooperativa de Trabajo", mientras sólo siete pertenecían a Jorsar.
La causa se había iniciado por denuncia de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), que detectó "una importante disminución de personal declarado en relación de dependencia". La investigación judicial verificó luego que las renuncias de los empleados y la constitución de las cooperativas se formalizaron en la misma escribanía, lo que abona la hipótesis de la maniobra evasiva.
Las fuentes indicaron que el caso "va más allá de una mera evasión de aportes" y, por el engaño que implica la constitución de sociedades falsas, constituye el delito de "evasión agravada" que tiene una pena mínima de 3 años y seis meses de prisión, por lo que se constituye en un delito no excarcelable.
"Los actos de las renuncias y de constitución de asociaciones cooperativas importan la exteriorización de falsos sucesos de parte de la contribuyente bajo los cuales se ocultó la verdadera relación con sus empleados bajo dependencia y su rol de sujeto obligado", sostuvieron los investigadores.
Las fuentes confirmaron que en las próximas horas serán indagados por el juez. De progresar el caso, se constituiría en un “leading case” con respecto a infracciones a las leyes previsionales, utilizando como herramientas la creación de cooperativas a la manera de lo que prevee el tipo penal de defraudación previsional cuando habla de “interpósitas personas”.