A un año de la renuncia de Elena Highton de Nolasco, el Ejecutivo no propuso ningún candidato para la vacante en la Corte Suprema y en el Congreso nadie visualiza una solución a corto plazo.
Se cumplió un año de la presentación de la renuncia de Elena Highton de Nolasco como jueza de la Corte Suprema de Justicia de la Nación tras haber permanecido 17 años en el cargo. Aunque pasaron 365 días, el máximo tribunal sigue con cuatro miembros y ninguna mujer.
Durante estos largos meses, el Congreso debatió reformas en el número de integrantes de la Corte e incluso el Senado logró recientemente la media sanción de un proyecto para ampliar de 5 a 15 integrantes, con paridad de género.
Hasta el día de la fecha, sin embargo, el Ejecutivo no propuso ningún candidato para la vacante, aunque circularon varios nombres de posibles reemplazantes a pesar de transcurrió holgadamente el plazo fijado por el Decreto 222/03.
La norma establece que, producida una vacante, en un “plazo máximo de 30 días, se publicará en el Boletín Oficial y en por lo menos 2 diarios de circulación nacional, durante 3 días, el nombre y los antecedentes curriculares de la o las personas que se encuentren en consideración para la cobertura de la vacancia. En simultáneo con tal publicación se difundirá en la página oficial de la red informática del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos”.
Desde el interior del Congreso consideran que la opción de ampliar el máximo tribunal pone en juego “más sillones para negociar”, aunque será muy difícil que la reforma consiga el visto bueno en Diputados.
El principal problema que enfrenta el Gobierno de Alberto Fernández es la falta de consenso en la Cámara alta, ya que necesita el apoyo de dos tercios de sus miembros presentes y nadie visualiza una solución a corto plazo.
“Se está trabajando para que la propuesta surja del consenso que se logre entre los actores involucrados”, dijo el jefe de Gabinete, Juan Manzur en su último informe de gestión. Desde el interior del Congreso consideran que la opción de ampliar el máximo tribunal pone en juego “más sillones para negociar”, aunque será muy difícil que la reforma consiga el visto bueno en Diputados.
A su vez, distintas organizaciones civiles solicitaron, en reiteradas oportunidades, que se postule una mujer para ocupar dicho cargo, para superar la “subrepresentación de mujeres en los cargos de mayor jerarquía del Poder Judicial de la Nación, y en especial en el más alto tribunal”.