Se presentó en la Cámara de Diputados de la Nación un proyecto de ley para regular las “Deepfakes”, penalizando el uso no autorizado de imágenes personales mediante tecnología de inteligencia artificial.
La iniciativa del diputado Juan Fernando Brügge (HCF) establece sanciones severas para quienes utilicen esta tecnología con fines ofensivos o dañinos incorporando el artículo 129 bis al Código Penal de la Nación y establecer penas de prisión de cuatro a ocho años “para quienes utilicen inteligencia artificial para crear, exponer, exhibir, comunicar, distribuir, reproducir, transmitir, comercializar o intercambiar imágenes, audios o videos de índole sexual íntimo de una persona o grupo de personas sin su consentimiento”.
El proyecto también propone la incorporación del artículo 157 ter al Código Penal que establece penas de prisión de dos a cuatro años para quienes supriman, oculten o editen el aviso claro y visible de que un contenido ha sido generado o modificado utilizando inteligencia artificial.
También prevé “penas de prisión de cuatro a ocho años para quienes, sin el consentimiento informado y expreso de la persona implicada o de sus herederos, generen o modifiquen videos, audios, rostros de personas, grabaciones de voz y escenarios ficticios con la intención de hacerlos parecer reales, en detrimento de las actividades personales y profesionales de alguna persona humana o jurídica”.
Solo estarán exceptuados de la penalidad aquellos contenidos generados y modificados utilizando técnicas de inteligencia artificial que sean claramente identificados y que tengan fines de interés general, educativo, histórico, científico o cultural, así como parodias y ejercicios del derecho a informar, siempre que se refieran a funcionarios públicos o personas de notoria exposición pública.
El proyecto también propone la incorporación del artículo 157 ter al Código Penal que establece penas de prisión de dos a cuatro años para quienes supriman, oculten o editen el aviso claro y visible de que un contenido ha sido generado o modificado utilizando inteligencia artificial.
El término “Deepfake” se refiere a la combinación de los siguientes conceptos ‘deep learning’ (aprendizaje profundo) y ‘fake’ (falso). Se utiliza generalmente para montar un engaño, creando la ilusión de que una persona está hablando o actuando de una manera que no es real, ya que no participa realmente. Es decir, que se simula acciones o expresiones de personas en situaciones que no han participado, para provocar un engaño con fines de desprestigiar o afectar su honor, imagen y/o reputación.
Entre sus argumentos, la medida sostiene que “la rápida evolución de la inteligencia artificial (IA), en los últimos tiempos, ha venido a generar nuevos desafíos para la humanidad, convirtiéndose en una herramienta tecnológica útil para el ser humano”.
“Pero, como toda creación del ser humano puede ser utilizada con fines dañosos, en ese sentido, se puede verificar que ha permitido la creación de contenidos audiovisuales manipulados, generando de esta manera noticias falsas y desinformación a la población, sustituyendo imágenes y voces reales de personas por otras que no participan en los productos audiovisuales”, remarcó.
Por último, el texto afirmó que “la proliferación de deepfakes en el mundo digital representa un desafío significativo para la protección de los derechos de las personas y la integridad de las instituciones. En Argentina, la ausencia de una regulación específica sobre el uso indebido de deepfakes crea un vacío legal que permite la afectación de derechos personalísimos que pueden configurar delitos sin una sanción adecuada. Por ello, este proyecto de ley tiene como objetivo llenar ese vacío y proporcionar un marco legal claro y efectivo para abordar esta problemática”.