En la presentación se pedía se declare la inconstitucionalidad del sistema de televisión codificada, como modalidad para comercializar la transmisión de los partidos del seleccionado. Las empresas que adquirieron los derechos de emisión con carácter de exclusividad de todos los partidos de fútbol que disputará la selección nacional durante las eliminatorias para el mundial de fútbol de Japón - Corea 2002, buscan a través del sistema codificado maximizar sus ganancias.
Según el escrito del doctor Andrés Gil Domínguez, la modalidad de comercialización de este evento viola diferentes derechos que se encuentran expresados en la Constitución Nacional. El derecho a la información, el principio de no discriminación, la prohibición de explotar posiciones dominantes del mercado, el derecho de los consumidores y usuarios y la afectación de un bien colectivo: “por lo que representa histórica y culturalmente, la selección nacional es un bien de todos”, sostiene el letrado.
Mañana comienza la disputa de las eliminatorias para el próximo mundial, y la Argentina enfrenta en el estadio monumental a la Selección de Chile. Solo podrá ser visto en directo por quienes tengan un contrato con alguna empresa de televisión por cable (un negocio oligopólico , donde las empresas Cablevisión y Multicanal concentran el 90% del mercado de la Capital Federal) y a su vez paguen un adicional para acceder a la emisión que será codificada.
Situación similar se había dado cuando durante las eliminatorias al mundial de Francia de 1998 la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) vendido los derechos, pero a través del decreto presidencial 304/94 firmado por el entonces presidente Carlos Menem dichos encuentros se pudieron ver en directo y por televisión abierta. Estos decretos fueron luego derogados por considerarse que el tema debería ser tratado por el Congreso.
La jueza Córdoba desestimó el pedido de la medida cautelar a la vez que no se expidió sobre la cuestión de fondo. Mañana por la mañana Domínguez presentará una apelación de la medida.