Este sistema, como es obvio, no reemplaza el régimen de notificaciones (por cedula, por nota, etc.), establecido por el Código Procesal Civil y Comercial. Para eso es necesaria una reforma legal, que sería bienvenida, atento las demoras y el inútil dispendio de actividad judicial que suele producir el actual sistema.
La finalidad del nuevo sistema informático de consulta de expedientes es descongestionar las mesas de entradas de los juzgados civiles. Todos los letrados pueden contar las veces que tuvieron que hacer una cola de quince minutos, solo para enterarse que el expediente “no está en letra”, o para copiar un proveído de tres renglones, a fin de confeccionar una cédula. Se suponía que la consulta “on-line” iba a acabar con esto, con la consecuencia de una mejor utilización del tiempo (y el esfuerzo) por parte de los sufridos letrados y una mejor asignación de las tareas para los empleados de los juzgados.
Sin embargo, cuando alguien usa el sistema de consulta, se encontrará con los siguientes “inconvenientes”:
Muchos juzgados no ponen la fecha completa del proveído (vgr. Ponen “Buenos Aires de marzo de 2000) o quien firma el mismo (Juez, Secretario, etc.), datos imprescindibles para hacer cédulas, oficios o mandamientos. El resultado es que hay que ir al juzgado y pedir el expediente.
Otros, dejan en blanco la fecha de audiencias.
Un juzgado todavía no puede consultarse. Lo mismo ocurre con la totalidad de las Salas del fuero.
Al parecer (y esto sería lo peor de todo) algunos juzgados no actualizan diariamente la información. Según se nos informó, no todos los juzgados del fuero están en red (“on line”). Los juzgados que no están en red, deben subir la información a la misma todos los días, pero, aparentemente, se producen atrasos. Esto es sumamente peligroso, porque los consultantes corren el riesgo de obtener información incorrecta.
Ya se habrían producido denuncias de letrados, afectados por estas falencias del sistema.
Los propios empleados que atienden en uno de los puestos de consulta habilitados por el fuero (el de Lavalle al 1200, donde antes funcionaba el Colegio Publico de Abogados) advierten a los consultantes que no confíen en que los datos que figuran en pantalla estén actualizados.
Evidentemente, si no se puede confiar en la seguridad del sistema, no tiene mucho sentido consultarlo, con lo cual las mesas de entradas de los juzgados se abarrotaran nuevamente.
Parece innecesario decirlo, pero un sistema de consultas on line no puede ser "más o menos confiable" o "más o menos completo". De lo contrario, nos encontramos con que el Poder Judicial ha gastado el dinero de todos los contribuyentes, sin demasiado sentido.
Convocamos a todos los colegas a dar su opinión sobre el tema y, en especial, invitamos a aquellos que hayan tenido algún problema de falta de concordancia entre la información que figura en pantalla y la que surge del expediente, a que nos hagan llegar su queja a nuestra sección de .
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