El reclamo es el segundo de esta naturaleza formulado por familiares de las víctimas de la subversión que actuó en el país en la década del 70. El lunes de esta semana había efectuado un pedido similar el futbolista Marcelo Gambandé, también por el asesinato de su padre.
La nueva presentación fue formulada por el mayor de Caballería en actividad Diego Lucas López Vargas, con destino actual en el Colegio Militar de la Nación quien reclamó 220 mil pesos previstos por la Ley 24.411.
Además se presentaron en la misma acción los otros dos hijos del militar asesinado, Laura Monica López Vargas y Néstor Marcelo López Vargas. En la presentación se advierte que "en la pureza idiomática “paramilitar” es un grupo que imita la organización y la disciplina militar" y por lo tanto las bandas subversivas, ERP, Montoneros, FAR y FAP, con organización y disciplina militar, eran grupos paramilitares, y sus victimas también tienen el derecho de reclamar los beneficios de la ley 24.411".