"Creo que ya teneos un arrepentido. espero que ese arrepentido se presente a la justicia", reclamó Liporaci a primeras horas de la mañana al conocer el reportaje publicado por el diario la Nación, en el cual un presunto senador confesaba el cobro de la coima.
Sin embargo, por la tarde la contraofensiva de los senadores justicialistas no se hizo esperar y en bloque anunciaron que declararán ante escribano público que ninguno de sus miembros había efectuado tales afirmaciones, y mucho menos cobrado coimas.
En igual sentido se pronunció el peronista formoseño, e integrante también del Consejo de la Magistratura, Ricardo Branda, al asegurar que " nunca he conocido un caso de soborno o cohecho" en el Senado de la Nación.
Branda dijo también que le gustaría que "alguno se arrepienta, venga y confiese para salir de esta situación", porque "hay que aclarar este marco de sospecha y quién estuvo atrás de esta maniobra".
El senador es uno de los miembros de la Cámara Alta que figura en el anónimo que desató el escándalo como sospechado de haber cobrado sobornos. "Me sorprendió aparecer en el panfleto", reconoció hoy al retirarse de los tribunales federales de Retiro, tras declarar como testigo ante el juez Liporaci.
En ese sentido, dijo haberle contado al magistrado "todo lo que nococia sobre la conformación de la Ley" de Reforma Laboral, y recordó que él "siempre" estuvo "en contra" de la aprobación de la norma pero que la había votado " afirmativamente por disciplina" en el seno de su bloque.
En tal sentido aclaro que "el espíritu de cuerpo tiene que estar para salir de esta crisis", a la vez que se manifestó "totalmente dispuesto para mostrar" su patrimonio, cuya declaración jurada se encuentra también el Consejo de la Magistratura del cual es integrante.
Por último, advirtió que "nadie desconoce que en la Argentina hay corrupción pero combatirla no es pelea de una sola persona, y la justicia necesita herramientas".