Uno de los temas más reiterados durante el debate sobre el Consejo de la Magistratura fue el cambio rotundo en la conformación de la Comisión de Selección. ¿Cuáles son las características que mayor preocupación genera entre los legisladores?¿Se puede hablar de la predominancia de la “corporación judicial”?
Tras la media sanción en la Cámara de Diputados para reformar la Ley del Consejo de la Magistratura, algunas cuestiones quedaron en el tintero y seguramente serán observadas en el Senado, donde la paridad será mayor. Es el caso de la composición de la Comisión de Selección que plantea la iniciativa impulsada por sectores de la oposición.
El proyecto aprobado por los diputados sostiene que esa comisión pasará a estar integrada por tres jueces, cuatro abogados, tres diputados y los representantes del ámbito académico y científico (tres). El tema no resultó ajeno a la polémica, todo lo contrario. Vilma Ibarra sostuvo que esa composición causa un "desbalance" en favor de las corporaciones entendidas como "sectores que tienen intereses creados en la función judicial, concretamente, los jueces y los abogados que litigan".
Lo mismo destacaron, días atrás, varias organizaciones no gubernamentales, entre las que se encontraban el CELS, ACIJ, ADC o el CIPPEC. Para ellos, la composición tal como se encuentra, "deja a los representantes de los órganos de la voluntad popular en clara minoría en relación con los restantes estamentos".
"Queremos la mayor transparencia y garantía de idoneidad de nuestros jueces, como objetivo del proceso de selección para evitar que lleguen a ocupar dichos cargos los más amigos del poder de turno o de una corporación", culminó.
Ibarra retomó esas palabras y explicó: "Aquí se incorporan cuatro abogados, tres académicos -de los cuales dos son abogados-, y tres jueces. Así, tendríamos a diez representantes de las corporaciones con mayores intereses creados en la función judicial decidiendo sobre la selección de los jueces". Y agregó: "Estamos hablando de diez representantes sobre trece integrantes de la comisión", lo que "implica otorgarle todo el poder de selección a las corporaciones con mayor interés en la administración de Justicia".
En el mismo sentido se expresaron los oficialistas Alejandro Rossi y Gerónimo Vargas Aignasse. El primero sostuvo que el problema es algo de "sentido común", ya que "es elemental que quien va con sus intereses a la mesa del tribunal no puede participar del proceso de selección, menos aún de abogados que son llevados al Consejo de la Magistratura por un procedimiento absolutamente político, con listas internas, con conflictos ideológicos, etcétera, sin ningún control externo en cuanto al modo de llevar a cabo las elecciones".
Vargas Aignasse agregó: "Me sigue pareciendo antiético y lo digo como abogado que los abogados, que viven de los honorarios que les regulan los jueces, participen de su proceso de selección. No me parece que deban estar. Sí deben figurar, como hasta ahora, en una mínima expresión, pero sin participar en determinadas cuestiones". El tema ahora se debatirá en el Senado.