El cuerpo citó al magistrado para que comparezca según el artículo séptimo del reglamento de la Comisión, en el marco de diversas causas que Marquevich instruyó.
Acerca de la instrucción de la causa conocida como “Operación Strawberry” donde se incautaron cerca de 2000 kilogramos de cocaína, Marquevich, señaló que en Argentina “hay una falla en el sistema judicial, y falta la incorporación de la figura del informante”, postura coincidente con la del consejero y diputado Miguel Angel Pichetto, quien había mencionado en sesiones anteriores de la Comisión de Acusación, “la ausencia de esta figura en la normativa legal”.
El Tribunal Oral federal de San Martín, anuló las 5000 fojas del expediente “Strawberry”, pero la Cámara de Casación confirmó las actuaciones del magistrado y solicitó buscar a los prófugos para comenzar con un nuevo juicio. Sobre este punto, Marquevich manifestó que “un juez da garantías, pero no es el que debe realizar allanamientos. Un juez cuida que éstos se realicen correctamente”.
En la "Causa Strawberry" fueron absueltos todos los imputados por supuestas irregularidades cometidas durante la instrucción, así lo dispuso el Tribunal Oral Federal de San Martín, que revocó la sentencia.
El magistrado declaró en una audiencia pública durante 5 horas, y habló sobre 14 causas que se tramitaron en su juzgado, entre ellas, la de la muerte del brigadier Etchegoyen; contaminación del Medio Ambiente; las amenazas al fiscal Pablo Lanusse en la causa conocida como “Mafia del Oro”; “el procesamiento al ex general Videla”. El juez también se refirió a las intervenciones de las líneas telefónicas. Sobre punto señaló que la responsabilidad de las intervenciones telefónicas fue de las “Fuerzas de Seguridad”.
Con respecto al procesamiento al ex general Jorge Rafael Videla, Marquevich, señaló que decidió “llevarlo detenido a la Unidad 16, y me pidieron juicio político a través del fiscal Quiroga, también me pidió juicio político la Cámara Federal de San Martín, y ¿porqué? –se preguntó- por qué no lo había llevado a la casa al señor Videla”, respondió. “Un juez por esta causa pidió mi juicio político -prosiguió el magistrado federal- pero si tuviese que instruir esta causa de nuevo, Videla estaría en la Unidad 16 y no en su casa”.
Marquevich, en relación a la “Causa del Oro” señaló que cuando se inició esta causa en el año 1996 era juez de instrucción, y que en un principio el expediente lo instruía el juez federal de San Isidro, Conrado Bergesio, y el fiscal Pablo Lanusse. “Se trataba de una causa superficial”, manifestó el juez al tiempo que recordó “Alfredo Yabrán (el empresario telepostal) vivía, y en ese entonces había peleas políticas con Cavallo (el ex ministro de Economía de Carlos Menem)”.
“El primer segmento de esta causa tiene que ver con la detención de un ciudadano italiano. Esta causa va a la Cámara que lo termina sobreseyendo el 25 de marzo de 1997. El otro segmento se inicia con la declaración testimonial que realiza Cavallo. El ex ministro dijo en esa oportunidad que las amenazas al fiscal Lanusse se les puede atribuir a Carlos Corach (ex ministro del Interior de la gestión de Menem) o a Yabrán”.
“El juez Bergesio –continuó Marquevich- no lo investigó a Corach, lo investigó a Yabrán y a sus empresas postales, pero hasta el día del cierre de la causa no hubo jamás una imputación” contra el malogrado empresario, aseguró el magistrado.
“A la causa de Bergesio, se agregaron datos relacionados sobre el tema postal, pero se presentaron los abogados de Yabrán y pidieron falta de acción. Cuando Bergesio decidió recusarse me da la causa a mí y de ahí en más tuve la presencia de los abogados de Lanusse, cinco veces en mi juzgado, incluso al mismo fiscal. Ellos me plantearon que siga con la línea de Yabrán. Yo soy amigo de la familia de Lanusse –admitió Marquevich— y los letrados dijeron que había un incidente de falta de acción porque entendieron que ayudaba a Yabrán”, recordó el magistrado.