El jury de enjuiciamiento bonaerense resolvió destituir al juez de Garantías de Olavarría, Antonio Saladino. En su decisorio, el tribunal también estableció que estará inhabilitado para ejercer cargos públicos, a la vez que se denunció su inconducta durante el transcurso del debate.
En enero de 2010, el asesinato del abogado de Olavarría, Marcos Alonso, con elementos propios de un crimen mafioso, conmocionó a la comunidad de esa ciudad. Poco tiempo más tarde, la investigación de un fiscal hizo que las miradas apuntaran al juez de Garantías de la localidad, Antonio Saladino, quien fue señalado por ser sobornado para beneficiar a un detenido que era cliente del letrado.
Más de dos años después del hecho, este jueves, el jury de enjuiciamiento llevado a cabo en el Senado bonaerense decidió destituirlo de su cargo al dar por probadas las acusaciones en su contra, inhabilitándolo, a su vez, para que ejerza cargos públicos y denunciándolo ante el Colegio de Abogados de la Provincia de Buenos Aires (CAPBA) por su inconducta durante el desarrollo del debate oral (faltó en repetidas ocasiones, por ejemplo).
Durante la última jornada del jury, el fiscal acusador, Carlos Altuve, aseveró que “los términos que sostuvo la procuradora general contra Antonio Saladino los mantengo totalmente”.
Asimismo, señaló que la estrategia de la defensa del magistrado tendía a “establecer las características del asesinato del Dr. Alonso, y a esta acusación le interesa la valoración que determine si Saladino ha actuado de acuerdo a la Constitución o su buena conducta ha cesado y consecuentemente debe ser destituido por este tribunal”.
Luego de estas consideraciones, agregó que a su criterio había quedado debidamente acreditado que Saladino recibió una suma de dinero de parte de Alonso para que cambiara la carátula del expediente tramitado contra su cliente y, de esta forma, lo beneficiara.
“Entre ellos había una relación íntima, ya lo acreditó Fabiana Marquez quién hizo saber que habitualmente se juntaban a comer asados y a jugar al fútbol, y más aún, el 1 de Enero a la 1 de la mañana concurrieron a saludar a Saladino. Asimismo también su hermano reiteró que sabía de un acuerdo, y también el Dr. Marcelli, defensor oficial de Olavarría que certificó el trato que se dipensaban ambos”, precisó el fiscal.
Consignó, entre otras cosas, que “creemos que Saladino ha incurrido en actos de inconducta manifiesta ya que debía haberse excusado en cualquier causa que participara Marcos Alonso”, agregando a su vez que los jueces de Garantías resuelven conflictos entre las partes, por lo que no es normal que reciba a una de ellas con la asiduidad con la que recibía a Alonso”.
El defensor oficial, Eduardo Cirille, aseguró, por el contrario, que era importante poner énfasis en el asesinato del letrado debido a que fue un elemento contundente para revitalizar lo que en ese momento fueron todos comentarios. Es bueno que quede claro que la hipótesis Gallastegui, en el juicio oral por la muerte de Alonso, fue desestimada y se llegó a la conclusión de que no hubo relación con la muerte del abogado”.