Es lo que reclamó Arguelles al asumir, pidiendo
que se garantizara "la representación igualitaria de los jueces de cámara y de primera instancia y la presencia de magistrados con competencia federal del interior de la república". Pero no
se detuvo allí sino que insistió que "en su calidad de juez federal del interior del país, la inclusión de este estamento en la jerarquía asignada, es la más acabada muestra de la
conformación de nuestro organismo netamente federal". Sin embargo, a la hora de la crucial votación, la sila de Arguelles estaba vacía. El motivo aparente: era un viaje de descanso al
caribe . El reproche de los jueces estaba dado no por su derecho a un descanso sino por la fecha elegida, o ¿acaso no sabía que esa semana se definía la suerte de su par?. Pero lo más grave es
que en ese acto de asunción se arrogó "la representación de la justicia federal del interior del país", por lo que su deserción dejó sin legítimo derecho de defensa a uno de sus representados.
- / dju
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