Fue conocida dicha resolución en Tribunales y fue dictado por la Sala II de la Cámara, al tiempo que confirmó la decisión que había tomado en octubre del año pasado el juez federal Carlos Liporacci.
Liporacci ordenó realizar tareas gratuitas en el consultorio gratuito dependiente de la Universidad de Buenos Aires y en la Asociación de Lucha contra la parálisis infantil (ALPI) por presuntas amenazas al juez federal Juan José Galeano.
Una vez por semana y durante no menos de dos horas en un período de dos años deberá concurrir al departamento de asesoramiento gratuito que funciona en Tribunales y a la sede del ALPI, para cumplir tareas comunitarias a partir del primero de febrero al término de la feria judicial que se realiza en el mes de enero.
La decisión fue apelada por Cúneo Libarona ante la sala II de la Cámara Federal, que ordenó dictar un nuevo fallo ya que la calificación legal (amenaza simple), permite el beneficio de la “probation”.
El magistrado dictó la “probation” que fue apelada por el fiscal federal Guillermo Marijuan, quien a su vez sostuvo que a Cúneo no le correspondía la “probation” por tratarse de un delito más grave de “coacción agravada” ya que se trata de un delito cometido en ejercicio de su función.