Al llegar al palacio de tribunales, la actriz declaró estar "sorprendida, no salgo de mi asombro. Siempre dije que soy una persona de suerte". Sobre el valor de las alhajas afirmó "es mucho menor al que salió publicado. Pero para mí tienen un valor sentimental más que económico".
Las joyas fueron robadas en octubre de 1998 y recuperadas durante un operativo policial hace tres días. La conductora de los tradicionales almuerzos reconoció por fotografías que las joyas eran las que le habían sido sustraídas y aclaró "no son todas las que me robaron, las alhajas más importantes no están".
La causa se tramita en el juzgado de instrucción 24, a cargo del doctor Sergio Torres, quién dispondrá la entrega de las joyas a la señora Legrand en “custodia precaria” hasta que terminen las actuaciones.
La animadora no se retiró de tribunales con las alhajas "por cuestiones de seguridad".