La Sala Segunda de la Cámara confirmó el sobreseimiento que había dispuesto el juez federal Jorge Urso, quien había sobreseído a Massera en la causa iniciada por una denuncia que formuló el abogado Ricardo Monner Sans, a raíz de las declaraciones que en 1998 formuló el ex miembro de las Juntas militares.
En esas declaraciones Massera manifestó que Videla era "una buena persona y un señor", entre otras afirmaciones.
En su presentación, el letrado acusó a Massera de violar la ley que reprime actos discriminatorios y de amenazas en contra de políticos.
Los camaristas Martín Irurzun, Horacio Cattani y Eduardo Luraschi concluyeron en sostener que las afirmaciones de Massera no pueden ser incluidas en la figura penal conocida como apología del delito, ya que dijo lo que pensaba acerca de la persona de Videla pero no hizo referencia a hechos de la dictadura militar.
Según entendieron, los dichos vertidos por Massera "no son sino una opinión respecto de la personalidad" de Videla "sin que pueda inferirse una exaltación de los aberrantes hechos ilícitos por los cuales fuera condenado".
También consideraron que sus dichos "no tienen corte discriminatorio y que no hubo amenaza de Massera hacia políticos sino que sólo se limitó a hacer comentarios acerca de su actuación".