En su función no es nuevo, y la permanencia en el cargo --su identidad política con la Alianza lo acomoda más con el presente-- le permitieron diseñar una política de seguridad nacional en base a la prevención y a una exitosa experiencia piloto en el barrio de Saavedra con la participación de la comuna, la policía y los vecinos.
Esa experiencia se va a extender a todo el país y Ciafardini asegura que cuando Aníbal Ibarra, el futuro jefe de gobierno porteño, afirma que va a disminuir el delito lo hace con los ojos puestos en esta experiencia participativa.
Desde ese lugar también pudo advertir que la tan mentada política de "tolerancia Cero" que implementó Rudolph Giuliani en Nueva York "fue una gran operación de marketing que se montó sobre una realidad que ya existía" en los Estados Unidos donde habrían descendido los índices de desocupación.
En un reportaje concedido a Diariojudicial.com Ciafardini advirtió que "no hay que esperar que las cárceles solucionen el problema del delito" ni que "una justicia superpoblada de causas" pueda hacer algo para ello.
A partir del relevamiento efectuado desde el ministerio entre camaristas y jueces de todo el país, la dirección a su cargo va a tener una activa participación en los borradores de la reforma del Código de Procedimientos en materia Penal, con "un mayor protagonismo fiscal en la investigación", eliminando la participación del juez de instrucción que pasará a ser juez de garantías.
"Se abre la posibilidad de avanzar en la reforma del Código de Procedimientos Penal hacia un proceso acusatorio puro", se ilusiona el funcionario. El desarrollo del reportaje es el siguiente:
Dju: Hace dos años hablábamos de lo que se conoce como la "tolerancia Cero" en Nueva York, implementado por Rudolf Giuliani como un modelo a imitar, para combatir la delincuencia. En ese momento se veían las fisuras que se ven ahora en la política de mano dura?
MC: "Yo creo que siempre que se habló de ese tema se habló con una cierta precaución, con cierto cuidado porque era un anuncio que se hacia desde otro país, con características muy diferentes y recién empezaba a conocerse. No se podía saber si iba a ser un resultado sostenible en el tiempo y si tenía aspectos colaterales negativos, porque uno no lo veía de cerca, sino a través de información recogida a través de los medios. Ya en aquel momento había cuestionamientos teóricos desde los mismos círculos norteamericanos; algunos por el lado de los derechos humanos, pero no tantos; Pero había cuestionamientos que sí decían que los Estados Unidos estaban en el nivel más bajo de desocupación de los últimos veinte o treinta años, y que eso tenía que tener una incidencia en la disminución del delito.
Hoy se terminó demostrando que eso era así, que lo de Giuliani no fue nada mas que una gran operación de marketing que se montó sobre una realidad que existía y que era preexistente a el. De hecho se demostró que el delito violento bajó en casi todas las ciudades importantes de los Estados Unidos, en ciudades que no tenían el mismo plan que Giuliani y en ciudades que no tenían un plan distinto al que habrían tenido desde siempre. Es decir que ha habido un impacto de la situación social, socioeconómica. Después se han señalado algunos efectos propios de la ciudad de Nueva York, como es el mercado del Crack, la estabilización del mercado, pero lo cierto es que esto es un fenómeno general en todos los Estados Unidos y como Nueva York es la vidriera y es la ciudad que más llama la atención hubo un oportunismo político, aprovecharon esto para hacer esa campaña de la "tolerancia cero" era la receta, vino cuando ya estaba bajando el delito.
Dju: ¿Porque si ya se conocía ese diagnóstico, cuando hubo que dar una respuesta a los planteos que en la Legislatura de la Provincia de Buenos Aires formuló el Justicialismo en materia de seguridad, algunos dirigentes de primera línea de la Alianza echaron mano justamente a la "tolerancia cero".
MC: A mi me parece que hay decisiones que se toman desde los más altos niveles políticos que tienen más un sentido político y comunicacional que científico-preventivo del delito en realidad. Por ejemplo aquellas cosas que se anuncian en las campañas electorales, que lo que buscan es más calmar un sentimiento de venganza generalizada, o de violencia o de temor visceral, subconsciente, que existe en la gente, en el colectivo. En general es más que nada un efecto comunicacional, del voto, en ese caso.
Yo creo que la posición en la provincia de Buenos Aires quedó apresada en ese discurso que se inicia desde el oficialismo jugando con una situación en el subconsciente colectivo o en el inconsciente de mucha gente, y esta fue una discusión en términos comunicacionales y políticos. Ninguno de los que hace estas afirmaciones tiene un apoyo científico, en el sentido que pueda demostrar que esas medidas puedan bajar el delito.
Dju: En ese momento desde la subsecretaría se daba cuenta que los índices de delincuencia reales no reflejaban lo que se decía en cuanto a crecimiento de la delincuencia...
MC: Nosotros tenemos mediciones del delito hasta 1999. Porque las mediciones más importantes, que son las encuestas de victimización, es decir aquella forma de investigar el delito que levanta la cifra negra, que es muy importante porque nosotros tenemos hasta un 60 por ciento de cifra negra, es un tipo de investigación bastante sofisticada y compleja que se hace una vez por año.
La encuesta de victimización es una encuesta poblacional que se hace con el mismo sistema con que se hacen las encuestas políticas o de marketing; es decir con muestras poblacionales y después proyectando los guarismos se obtiene una cifra aproximada del hecho real. Es decir que si yo tomo muestras y esas muestras están bien hechas, cuando yo hago la proyección, si yo tomo muestras de la gente que fue victimizada por un delito después tengo una aproximación de la cantidad de hechos, de victimas que hubo en la sociedad de ese tipo de delito. Y ahí están tanto los denunciados como los no denunciados. A partir de ahí lo puedo comparar con las denuncias oficiales. Este es el conocimiento del fenómeno social en su realidad, no de la cantidad de denuncias. Porque la cantidad de denuncias pueden variar de acuerdo a que la policía reciba más denuncias de la gente, o que la policía haga mas operativos. Incluso pueden cambiar las características de los hechos denunciados de acuerdo a que la policía enfoque más un tipo de hechos que otro.
Dju: Existe alguna relación con las recientes denuncias acerca del accionar de policías que detenían a inmigrantes en la puerta de la Iglesia de San Cayetano y que después involucraban a los detenidos en delitos?
MC: Por supuesto, si la policía recibe una orden, un mandato o naturalmente se inclina por la información en los medios, y se maneja a través de un prejuicio, es decir se está diciendo es más sospechable el que tiene cara de paraguayo o de boliviano que otro, y detiene por averiguación de antecedentes a mayor cantidad de esta gente, es probable que encuentra más gente con armas o gente que está cometiendo un delito con estas características; pero es simplemente porque enfocó su accionar en un sentido y no en otro.
Estas cosas no se pueden manejar, salvo que uno tenga una encuesta de victimización, porque en ella uno tiene el número real de hechos. Respecto a las características del autor ni siquiera las encuestas de victimización nos permiten acercarnos demasiado. Es imposible de abordar porque las características del autor real, en los casos en que el autor no tiene contacto con la victima, no se puede obtener información. Porque por ejemplo en el robo a viviendas, donde la victima no está no podés saber quienes fueron los autores. Lo único que podés tener cierta aproximación a las características del autor es en el robo con violencia en el que tenés contacto personal.
Dju: ¿Existe información en los relevamientos efectuados desde la secretaría que de cuenta acerca de existencia de discriminación, de marginación, de presencia de la xenofobia en cuanto a la imputación de delitos?
MC: "El tema sería como lo demostramos realmente. En la realidad hay más detenidos argentinos que paraguayos o bolivianos. Salvo que lo contrapongamos contra la población total, hay los porcentajes pueden variar. Quiero decir que hay más argentinos detenidos que paraguayos y bolivianos en bruto. El tema es que nunca podemos establecer si es que la policía esta focalizando más su atención en cuanto a estereotipos con determinadas características, o incluso con una inteligencia policial, o si está actuando de una forma pareja y le da como resultado más de esta gente extranjera. Habría que estar en la misma policía, en su entramado, para saber qué es lo que está pasando.
Ahora yo creo que eso no se puede controlar desde a estadística pero si se puede controlar desde el plan de prevención. Porque cuando los planes de prevención como los que nosotros estamos planteando, con mucha participación comunitaria, esto funciona también como una especie de monitoreo y control de como trabaja la policía. En el contacto con la gente discutiendo el tema de seguridad de una forma rutinaria y permanente, se puede tener una información importante de como está funcionando el sistema, si es o no es efectivo y porque.
Dju: ¿Cuales serían los planes que se deberían aplicar en el país una vez descartados otros puestos en practica en otros países?
MC: Nosotros estamos trabajando muy aceleradamente en el Plan Nacional de prevención del Delito, ya no en una visión general como la que se planteó hasta ahora en el Consejo de Seguridad, sino que lo estamos elaborando en sus detalles, y es un plan que funciona con triángulos operacionales, entre el gobierno local, la comunidad y la policía. Estas tres patas del triángulo serían las que tienen que generar el diagnostico, las propuestas -dentro de las propuestas técnicas disponibles-- y controlarse entre sí en cuanto al funcionamiento. Estos planes requieren un grado de compromiso muy elevado de parte del gobierno local, porque tiene que ponerse al frente en la convocatoria, en la forma de organización para que participe todo el mundo. Por otro lado requieren mucha coordinación entre el gobierno local y la policía, yo diría hasta una cierta subordinación del poder policial al gobierno local, al menos en cuanto al plan de prevención.
También tiene que existir una participación real de parte de la comunidad, no por sectores sino que tienen que participar todos los niveles de la sociedad.
Dju: Hasta ideológicamente pareciera que existen dos posturas: por un lado crear más fuentes de trabajo, una mayor educación, y acentuar la prevención, y por el otro asignar mas patrulleros a la policía, más armamento, o mas seguridad privada, en síntesis una política de mano dura. Como se hace para equilibrar en una única política estos encolumnamientos?
MC: El tema es no empezar a discutir una política de seguridad antes de hacer funcionar este esquema. En la política de seguridad hay líneas básicas que están marcadas por el esquema constitucional en el que vivimos, por el estado de derecho y por los recursos. Estos son los limites de los cuales uno no se puede salir cuando discute seguridad. Uno no puede pedir un policía por esquina porque no lo va a tener nunca, ni tampoco puede poner pena de muerte porque nuestro sistema no lo acepta, y tampoco se puede discutir cambios institucionales que son inviables, al menos en lo inmediato, en el esquema que tenemos. Hay limites. Con ese esquema y con esos recursos se discute en cada uno de estos triángulos, que son muy locales, en reuniones barriales e interbarriales. En cada uno de estos nodos se discute qué hacer en ese lugar para hacerlo mas seguro respetando los derechos de todo el mundo; una discusión focalizada donde lo que se discuten son medida concretas, no las grandes transformaciones generales. Discutir en concreto "con estos recursos y con este esquema legal qué se puede hacer en estas ochenta manzanas donde viven los que están discutiendo, sobre el tema seguridad, como se puede potenciar el tema vigilancia, como se puede potenciar el diseño urbano para que sea mas seguro, como se puede hacer para contener a los sectores juveniles que estén en situación de riesgo. Esto exige un compromiso político del gobierno local, y de la policía de responder a las demandas en la medida de las posibilidades reales, y de rendir cuentas después que se diseñan las acciones y de consuno se sabe que al mes siguiente se vuelven a reunir y que la policía tiene que estar de nuevo hay y explicar y hacer un balance de los que pasó. Por supuesto que de estas reuniones van a salir muchas demandas, el tema es que si esas demandas son racionales y están planteadas dentro de los limites. El gobierno y la policía van a tener que cumplir y acá es donde va a haber que hacer una readministración de recurso tanto de un sector como del otro para poder cumplir con esas demandas, garantizado por un sistema muy democrático de base donde haya una situación de rendición de cuenta.
Dju: De qué le ha servido la permanencia en este cargo durante más de una gestión para el diseño de una política?
MC: Claro Estoy desde la época de Arslanian en el Ministerio y desde la época de Maiorano como director Nacional. Me ha servido en cuanto a que desarrollamos mucho los contactos internacionales y de la información internacional detectamos estas formas de prevención y las pusimos a prueba durante dos años en el barrio de Saavedra de la Ciudad de Buenos Aires, a pesar de que no eran las mejores condiciones en las que estabamos trabajando porque el gobierno de la ciudad no estaba del todo convencida en cuanto a algunas líneas de acción, y la policía, en primer lugar, respondía a un gobierno de distinto color político. De todas maneras hubo buena colaboración de la comisaría 49. A pesar de esos aprendimos una enormidad de la experiencia de Saavedra y se lograron objetivos. Se logró cerrar el circulo de reunión de vecinos-policía-gobierno; se pudieron efectuar diagnostico, planteo de las acciones, realización de las acciones por parte de la policía y gobierno, balance de resultados. Se logró dar varias veces el circulo cosa que ninguna experiencia de prevención lo ha hecho antes en el país.Combinando estos con la opinión de los vecinos, después del plan la lectura es que si se sostienen estos mecanismo y el gobierno actúa con seriedad; si la propuesta de los vecinos es racional y posible se lleva adelante, y mejorando la vigilancia y la contención hay un efecto muy fuerte sobre una masa de delitos muy importante: el cincuenta por ciento o mas de los hechos que son cometidos por delincuentes no organizados, por grupos ocasionales, que cometen delitos frecuentemente, pero que no están organizados como bandas. Esa es una gran cantidad, y no son poca cosa porque roban con armas.
Si Aníbal Ibarra dice que va a bajar en un 20 o un 30 por ciento es porque está pensando en estos planes.
Dju: ¿Ccual es el grado de participación de la gente en este tipo de planes?
MC: La gente participa cuando va viendo que el plan se sostiene y que el compromiso de las autoridades es real, el grado de participación va aumentando. La comunidad está muy decepcionada y muy defraudada por miles y miles de procesos de convocatoria que se inician y terminan en nada. Esto defrauda mucho. La gente está preocupada por el tema de seguridad y cuando ve una convocatoria seria responde favorablemente.
Estos planes están diseñados de manera que no quede nadie afuera de la convocatoria. No es una convocatoria genérica donde se acercan solamente los vecinos de clase media, los que viven al lado de la comisaría. Se divide geográficamente la ciudad y las subzonas abarcan todo el territorio, así la villa también queda en una subzona.
El plan para todo el país se iniciará en la ciudad de Buenos Aires en unos meses y después seguiremos con el resto del país. Requiere del compromiso político del gobierno local. Con las provincias va a ser necesario un acuerdo con el gobierno nacional.
Dju: Hay dos temas que nos interesaría analizar: "delito y pobreza" y "delito y droga".
MC: Yo diría marginalidad y violencia; juventud y droga como combinaciones explosivas. La respuesta básica es contención y para la contención hay recursos limitados. No hay recursos ilimitados para los planes sociales. El tema es que si se realiza una estrategia de prevención del delito, los planes sociales que sirven como contención de la juventud de los sectores juveniles tienen que quedar subordinados a la estrategia de prevención. No se puede dilapidar acción social el cualquier sector. Tenemos que concentrar acción social sobre aquellos sectores que vemos en mas riesgo de involucrarse en situaciones violentas o terminar como autores o victimas de situaciones violentas. Una buena administración de estos recursos está garantizada por una buena participación de la comunidad; en los lugares donde hay que hacer contención tiene que ser la misma comunidad la que señale donde hay que hacerla y que lo controle.
En Saavedra no se hizo solamente trabajo de rediseño d la vigilancia o rediseño urbano. también se trabajo en la construcción de alguna cancha deportiva en algún predio desocupado; en habilitar canchas que están construidas en los momentos que no se usan para que la escuela donde hay chicos en situación de riesgo pueda dar doble turno. Básicamente se consiguieron a través del ministerio de Trabajo, planes Trabajar asignados a los sectores juveniles que la propia gente del barrio vio como que era necesario que trabajaran, incluyéndoselos de esa forma en una supervisión. Sobre eso se montó la actividad cultural y deportiva, se los bombardeó con una cantidad de actividades que le dan en algún caso una entrada económica mínima que puede ser sustitución de entradas económicas ilegales, o por lo menos presentar una alternativa posible y mucha canalización de energía.
Dju: Otro de los temas instalados es el de las cárceles que funcionan como escuelas de delincuentes, y otros estereotipos como el que roba para drogarse...
MC: Esto no quiere decir que el que sale a robar es el drogadicto compulsivo que ya está quemado y que sale a robar porque si no roba tiene el síndrome de abstinencia. Un drogadicto que ya está en esos niveles no tiene ni capacidad para salir a robar. Que salgan drogados es otra cosa. acá hay un tema económico de base. No sólo para la droga se roba. Se roba para darle de comer a la familia. Habrá casos puntuales que este plan no los abarca. Un tipo que lo que quiere es consumir droga y de primera calidad y sale a robar, por supuesto que con un plan Trabajar no lo vamos a contener.
El tema de las cárceles es un problema de prevención del delito. La cárcel es lo residual. No tenemos que esperar que la cárcel solucione el problema del delito.
Lo que tenemos que hacer es solucionar el problema del delito a partir de la prevención, bajar la masa del delito. Este es un fenómeno sociológico con características de masividad. tenemos que bajar esa masividad con campañas de prevención y lo que quede el sistema penal todo puede llegar a estar en condiciones de funcionar un poco mejor. las cárceles superpobladas no van a poder cumplir ni ahora ni nunca ninguna función; una justicia sobrepasada de causas por mas que sean excelentes los jueces no van a poder hacerlo, ni la policía.
Si estamos hablando de una cantidad de delitos de una masividad tal que por ejemplo, el delito contra la propiedad, afecta a casi el 40 por ciento en un año de la población de un distrito, estamos hablando de millones de personas afectadas y de miles de autores de delitos. Entonces tenemos para llenar las cárceles que tenemos ahora, las que vas a construir y las que no se construyeron.
Acá lo que se esta planteando es una reinversión de recursos. Bajemos el volumen de hechos y después con lo que queda entonces medir la dimensión que tiene que tener el sistema penal hoy, porque estamos frente a un avance de una ola delictiva con características sociológicas de masividad y tenemos que hacer algo para que no ocurra, no para ver que hacemos después que pasaron los hechos.
Dju: ¿Como se evalúa el grado de participación de los jueces en la encuesta que efectuó el ministerio previo a la Reforma del Código de Procedimientos Penal?
MC: El que no contestó es porque le parece que no hay que cambiar nada, si le parece que hubiera que cambiar algo hubiera dicho algo, o le es indiferente en cierta forma. Se abre la posibilidad de avanzar en la reforma del procedimiento penal hacia proceso un acusatorio puro.
Son la dirección y otros asesores del Ministerio los que van a trabajar en la coordinación de los borradores de proyectos. Vamos a estar involucrados en la parte técnica, en la elaboración de la reforma que básicamente es darle un protagonismo al fiscal en la investigación. Eliminar la participación del juez de instrucción, transformar los jueces de instrucción en jueces de garantía y que la instrucción la maneje el fiscal. No hay que confundir el rol de investigador y de custodio de garantías en una misma persona, sino separarlos: al fiscal la investigación y al juez las garantías, como en la letra de la Ley sucede hoy en la provincia de Buenos Aires.