La FOETRA fundamentó la petición de la medida en "la omisión de la previa realización de una audiencia pública, que le ha impedido al gremio cuestionar el decreto presidencial, en el marco del régimen de otorgamiento de licencias para operar en el mercado del servicio telefónico, y las normas dictadas en su consecuencia".
El gremio consideró que el marco regulatorio propuesto posibilitará la "competencia desleal y afectará las fuentes de trabajo y condiciones laborales", ya que llevará a las actuales prestatarias del servicio a "bajar sus costos laborales o producir despidos".
El sindicato no sólo cuestionó "la irregularidad formal y el apresuramiento" del Gobierno para permitir el ingreso de otras empresas prestatarias, sino que consideró que el marco regulatorio propuesto "afectará a los sectores medios y bajos y a zonas consideradas no rentables para las empresas".
Ello se debe a que las nuevas empresas "pueden elegir con absoluta libertad el sector donde brindar sus servicios, y la competencia será solamente respecto de usuarios de alto y sofisticado consumo". Al mismo tiempo que se radicaba el amparo, más de un centenar de trabajadores telefónicos hicieron estallar bombas de estruendo al protestar hoy en el Palacio de Justicia contra los anuncios de desregulación del mercado.