“Si resuelven este problema -señaló el funcionario- destraban cinco concursos más”. Es que el abogado Carlos Compaired está ternado en dos concursos, para cubrir dos juzgados federales, de Comodoro Rivadavia y Santa Fé. Como el Senado no se expide para aprobar las ternas que fueron remitidas por el Ejecutivo, (en una de ellas está ternado Compaired) el mismo candidato corre riesgo de quedar afuera de la selección si la Comisión de Acuerdos del Senado, llegado el caso, le dijera que “no” al aspirante propuesto por el Gobierno. La situación se complica porque la Cámara Alta no ha elaborado ningún dictamen ni positivo ni negativo sobre los dos candidatos que remitió el Ejecutivo, que no puede seguir avanzando al no haber un pronunciamiento respecto a los candidatos que ya se han enviado.
Por otra parte, desde el Senado dijeron que “del Ejecutivo no llegó nada”. Lo que causó malestar dado que, según Cruchaga, si fueron enviados dos candidatos pero es “el Senado el que bloquea la situación”.
Hay quienes interpretan que este “silencio” del Senado es producto de “no querer pagar un costo político” al decir que “no” a la selección de los candidatos, porque lo que se pretendería en la bancada justicialista sería que el Ejecutivo enviase la terna completa para “poder elegir al candidato a cubrir el juzgado vacante que corresponda dado el caso”. Sin embargo, ninguno de los dos Poderes del Estado parece querer declinar su postura, en virtud de que el Presidente Fernando De la Rúa, junto al ministro de Justicia, Jorge De la Rúa dejaron la responsabilidad de “seleccionar al mejor de los candidatos de la terna” en Cruchaga, quien manifestó a Diariojudicial.com que “en agosto último se enviaron dos pliegos al Senado” con dos candidatos, Compaired, para cubrir un juzgado de Comodoro Rivadavia y Venegas Echagüe para cubrir un juzgado federal de Tierra del Fuego. También este último resultó seleccionado en dos ternas y aún no hubo ningún acuerdo al respecto.
En tanto en la Comisión de Selección del Consejo de la Magistratura, se está analizando la posibilidad de reformar el reglamento de selección de magistrados, para darle celeridad al proceso que dura nueve meses en realizar los exámenes necesarios para elaborar las ternas que luego son aprobadas y remitidas al Ejecutivo en un plenario del Consejo.
En su momento, en un plenario del cuerpo tras tomarle juramento a Carlos Maestro luego de que Cruchaga fuera designado como Viceministro de Justicia, fue aprobado un dictamen en el cuerpo que proponía a los candidatos por orden alfabético y no por orden de prelación, oportunidad en que algunos consejeros como el abogado Juan Gersenobitz, entendieron que “la nueva norma garantiza el ejercicio de la facultad discrecional de elegir que tiene el Ejecutivo”.
La resolución que fue aprobada establece que el requisito de que la terna vinculante que se remite al Poder Ejecutivo “sea formulada con un orden de mérito no surge del artículo 114 de la Constitución Nacional ni de la Ley especial que dicha disposición contempla”.
La reforma fue del artículo 47 del Reglamento de Concursos Públicos de Antecedentes y Oposición para la Designación de Magistrados del Poder Judicial de la Nación, aprobada por la Resolución 78/99 del cuerpo y sus modificatorias. La norma establece que “con sustento en el dictamen de la Comisión, los resultados de la audiencia pública y, en su caso, las impugnaciones, el plenario aprobará el concurso y remitirá al Poder Ejecutivo la terna vinculante de candidatos al cargo concursado en orden alfabético, acompañándose los antecedentes respectivos”.
La propuesta de la Comisión no será vinculante pero, para apartarse de ella o para declarar desierto el concurso, la resolución del Plenario deberá fundarse en la manifiesta arbitrariedad del Jurado en la calificación de la evaluación de antecedentes y de la prueba de oposición de los postulantes, o en los resultados de la audiencia a la que se refiere el artículo anterior, sin que resulten suficientes las meras discrepancias en cuestiones opinables o respecto de aquellos temas sujetos a las facultades valorativas del Jurado o de Comisión.
Sin embargo a pesar de la reforma del reglamento de selección, la designación de Cruchaga para remitir al mejor candidato a magistrado y las más de 10 ternas que el Consejo de la Magistratura envió al Gobierno, los juzgados siguen sin jueces, demora que perjudica el servicio que la Justicia brinda a la comunidad.
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