B) FALLO. Que traerá cola es el que dictó el pasado jueves -extrañamente callado por la gran prensa- el juez en lo Contencioso Administrativo Federal, Sergio Fernández. La disposición judicial obliga al empresario Eduardo Eurnekian a reunirse en Asamblea Pública para tratar su pedido de aumentar las tasas aeroportuarias –en realidad ya las está cobrando al doble por autorización de Domingo Cavallo y su ministro de Infraestructura, Carlos Bastos con la mirada del ORSNA (ente regulador de las concesiones de aeropuertos) para otro lado- ante la resistencia de los gremios aeronáuticos y de la propia Fuerza Aérea. La principal resistencia que fue el sustento del fallo de Fernández, se basa en la deuda de Eurnekian por el canon que le debe al Estado. Hasta el momento existe un impago de $ 170 millones al que se le sumarán otros $ 50 millones que vencen este año. En su momento, esta pelea por el pago del canon, fue la principal causa del enfrentamiento del actual auditor general de la Nación, Rodolfo Barra, cuando presidió el ORSNA. Pero salido Barra de esa posición clave para el negocio aeroportuario y la asunción del frepasista Eduardo Squaglia, Eurnekian se ha manejado con su propia estrategia de negocios. Squaglia, tampoco y pese a ser del mismo signo partidario que la diputada y gremialista aeronavegante, Alicia Castro, ha logrado calmarla en esta pelea de larga data que mantiene con Eurnekian. En este marco, se le hace difícil al empresario –según se analiza en Tribunales- mantener su promesa de hacer una segunda pista en Aeroparque, ganándole tierras al río. Hasta ahora, la principal inversión solo apuntó a un fabuloso negocio inmobiliario que le ha insumido unos $ 100 millones con el nuevo shopping habilitado en la estación aérea metropolitana.
C) MENEM. Deshoja la margarita para saber su destino final en la causa de las armas, como nunca atado a la decisión del juez en lo penal económico, Julio Speroni. Pero pese a ello, el ex presidente, no ha ocultado su satisfacción por el trato a nivel de su jerarquía que recibió el pasado martes 6. Más allá del fallo –se está en un 50% por el procesamiento y un 50% por la falta de mérito- Speroni tuvo el tino de cuidarlo de los excesos de cierta prensa que lo llevaron al ex presidente no sólo a contestar todas las preguntas sino a agregar información a la causa. De todos modos, Menem espera que este martes la Corte saque la asociación ilícita dentro de sus cargos y si bien el máximo tribunal lo hará en el caso Yoma, espera que ello abrirá un camino inexorable hacia su excarcelación porque en el caso del contrabando comenzó a blandirse un dictamen del fiscal de juicio Gustavo Bruzzone, de ese mismo fuero, que considera que un gabinete no puede cometer contrabando. Esa jugada podría bloquear una presunta resistencia de la fiscal Alicia Sustaita a una eventual falta de mérito de Speroni, impulsada por la cámara de ese fuero que ordenó la indagatoria de Menem y de Emir Yoma, pese a que la suerte de este no está atada a la del ex presidente. Otra novedad, en este juicio, es que si la cámara revoca la calificación de asociación ilícita el caso podría pasar a la Sala I del fuero federal que integran Luisa Riva Aramayo, Horacio Vigliani y Gabriel Cavallo, pero para tratar delitos conexos. Por eso, el caso podría pasar en su totalidad a Speroni ya que su par en lo penal económico Horacio Artabe se inhibió de seguir investigando el contrabando a Ecuador, aceptando la acumulación de los expedientes.
D) EMPATE. Técnico es el que se daría en el Consejo de la Magistratura con los jueces federales Roberto Marquevich de San Isidro y Luis Leiva de Mendoza. El primero tiene dictamen favorable de la Comisión de Acusación y el segundo acusatorio. Pero a su favor están los abogados Eduardo Orio y Mario Gersenobitz y los jueces, especialmente Claudio Kiper. Por eso se cree que en el plenario del próximo miércoles 28 –en principio estaba fijado para este miércoles 14- podría salir un dictamen absolutorio para los dos jueces, incluso porque Leiva hasta se vería favorecido por legisladores como Miguel Pichetto, pese a que es uno de los firmantes del dictamen de acusación. El electo senador rionegrino no oculta su disgusto con Raúl Moneta, el principal acusador de Leiva, por actitudes poco éticas que habría tenido el ex banquero. Pese a que fue el propulsor del expediente, Pichetto no será uno de los fogoneros para condenar a Leiva y busca posicionarse desde un punto más equidistante para que el PJ lo reasigne en el Consejo de la Magistratura. Tampoco el rionegrino ha ocultado su enojo con algunos jueces que en el pasado fueron a solicitar su apoyo y después olvidaron códigos de ética, propios de hombres de bien.