De todas maneras, Ruiz Moreno informó que el ex líder guerrillero mantiene en forma permanente visitas de familiares, amigos y allegados “sin ninguna restricción”, así como son frecuentes sus contactos con medios de prensa y representantes de organizaciones no gubernamentales y de derechos humanos, nacionales y extranjeros.
En todos los casos, indicó el funcionario, se cumplen los reglamentos internos sobre controles y requisas al que está sometido toda la población penal, y cuando ha habido algún problema “se ha debido a la de alguna visita ante los controles de la cárcel”.
Finalmente, Ruiz Moreno destacó que ha instruido especialmente a las autoridades del penal para que profundicen la investigación sobre los hechos denunciados y un caso de resultar falaces o tendenciosas, se evalúa la posibilidades de iniciar acciones legales contra el interno por parte de las propias autoridades de la unidad, que sienten dañado su buen nombre y honor.