Según los letrados, los camaristas Marcos Grabivker, Carlos Pizzatelli y Roberto Hornos se pronunciaron sobre una cuestión (el dictado de la falta de mérito) cuya revisión no fue solicitada ni por la fiscal, Alicia Sustaita, ni por la querella.
Salvi y Novak indicaron que la Sala B “debió limitarse a hacer lo que la Corte Suprema le había indicado”, en referencia a la resolución del máximo tribunal de noviembre pasado, donde tras decidir que no había asociación ilícita en el contrabando de armas ordenó que se redactara una nueva resolución que respetara ese dictamen.
Esa resolución es precisamente la que dio a conocer la Sala B el 8 de abril último, pero incluyó además la anulación de la falta de mérito, una medida que ponía a Menem al borde de una nueva indagatoria ante el juez Speroni. De esa forma, la situación judicial del ex presidente no cambiaría hasta tanto la sala II de la Cámara Nacional de Casación Penal resuelva sobre la nueva apelación.