B) INAUDITO. Así calificó el por dos veces presidente de la Asociación de Magistrados, el camarista de la Casación Raúl Madueño, el hecho provocado por la eterna demora que tienen algunos expedientes en las comisiones de disciplina y acusación en el Consejo de la Magistratura. Los mismos consejeros acaban de padecer la ira del abogado Carlos Garber, que denunció hace una década al juez comercial Favier Dubois (h) y ahora como el expediente nunca fue tratado por la comisión de acusación –viene de Diputados-, denunció penalmente a sus integrantes ante la justicia federal por haber supuestamente incumplido sus deberes al no resolver el pedido de enjuiciamiento al magistrado. La necesidad de poner un plazo límite para tramitar los expedientes sobre pedidos de juicio político es una vieja aspiración del sindicato de jueces, que incluso fue acompañada por proyectos de algunos de sus consejeros, que al parecer no han puesto la fuerza suficiente en la defensa de esa postura. Quizá el cosquilleo que padezcan los integrantes de acusación –ahora serán ellos los interesados en que en la sede de Comodoro Py 2002 se les archive rápidamente la denuncia que les hicieron- ayude a tomar conciencia que la lógica zozobra que tiene un juez por un pedido en su contra –justificado o disparatado, la preocupación la tiene igual- no puede extenderse como una amenaza damoclética durante tantos años –en el Consejo ya tienen expedientes de “cosecha propia” con más de tres años de trámite-. Viene tan fuerte este reclamo, que Madueño propondrá que la Asociación de Magistrados envíe veedores a las comisiones de acusación y disciplina –y eso que allí están los consejeros jueces-, para promover y garantizar un mayor respeto por la función judicial.
C) 194. Es el artículo del código procesal penal de la Nación que aún criticado por su inclusión, sigue firme en su texto, tal como lo imaginó su mentor, el recordado ex presidente de la Corte Ricardo Levene. Es que muchos doctrinarios y expertos procesalistas sostienen que a los jueces penales se les está prohibido iniciar causas “de oficio”. Sin embargo la regla establecida en ese artículo –en verdad no combina mucho con el espíritu del código ni con el resto de los artículos-, obliga a los magistrados a no mirar al costado y a iniciar investigaciones, indicando que: “El juez de instrucción deberá proceder directa e inmediatamente a investigar los hechos que aparezcan cometidos en su circunscripción judicial”. Esto viene a cuento del lamento de varios funcionarios del fuero penal –no se sabe cuál es la excusa cuando están frente a una situación de “in fraganti delito”, del que hasta podría actuar un particular- que ante los cortes de rutas, avenidas, puentes, vías y autopistas – el del día miércoles fue un piquetazo con más de mil cortes en todo el país- del que también resultan víctimas más de uno de ellos, dicen “yo no puedo hacer nada porque no puedo actuar de oficio”. Vamos muchachos, a veces hay que animarse.
D) PASION. Es la que se patentizó durante los días previos al mundial en la playa ubicada frente al palacio de Tribunales. Varios jueces, camaristas, secretarios y fiscales de manera sigilosa –personal auxiliar mediante- abrían el baúl o la puerta trasera del auto para llevar hasta la sede de su diario quehacer a un fiel compañero con quien compartirán parte de su vida durante el mes de junio. La famosa “caja boba” que mientras dure el mundial de fútbol será el punto de convocatoria obligado para la pasión futbolera, no podía estar ausente. Sin embargo, los más modernos, acostumbrados al uso de la computadora y que tienen conexión a internet -pagada por ellos porque la que da el Poder Judicial es marca “tortugol”, según se quejan-, fueron un paso más adelante: ya pusieron en los favoritos alguno de los varios sitios que replican la transmisión de America TV, cosa de ver las repeticiones de los partidos -sólo piensan madrugar para ver en directo los de Argentina- sin levantar la perdiz. Es que en las jornadas de tribunales ya no se limitan a trabajar hasta las 13:30 de cada día, muchas veces los jueces ya ni salen a almorzar afuera –la devaluación también les afectó el bolsillo-, sumado a un alto nivel de exigencia y mucha bronca, ya que la gente no se muestra dispuesta a esperar demasiado tiempo para obtener respuestas de los tribunales, por lo que el horario extendido es casi obligatorio. Sin más remedio que la conducción de una justicia desbordada, jueces, secretarios y fiscales piensan mechar algún golcito entre tanto amparo y tanta denuncia.
E) OROZCOS. Son otros los chorros. Yo los conozco. Sería una inmodestia negar la satisfacción que se siente en la redacción cuando nuestras noticias de tribunales aparecen mencionadas como fuente de información en algunos de los medios de alcance nacional o local. No han sido pocas las menciones y citas de nuestra página a lo largo de sus dos años y medio de vida y eso reconforta y obliga a redoblar esfuerzos. De esa manera, sabemos que nuestros colegas han admitido como consulta obligada de todos los días ("para saber qué nos estamos comiendo", según admiten) esperar la llegada del mail o la salida de Diariojudicial.com por Internet. Sería un acto de vanidad pretendernos dueños de todas las primicias ya que, dicho sea de paso, sólo nos reservamos un espacio en el amplio espectro de informar acerca de lo que sucede en el mundo de la justicia argentina. A veces, -creemos que por descuido- hemos podido detectar que algunas de nuestras notas aparecen sin mayores modificaciones en algunos de esos medios y en lugar de citarnos con nombre y apellido sólo se menciona eufemísticamente "en declaraciones formuladas a la prensa", y a renglón seguido aparecen los párrafos textuales de nuestros entrevistados. Por favor muchachos, sean menos tacaños y recuerden que entre David y Goliat una de las diferencias que existía es que el primero tenía puntería. Por nuestra parte nos comprometemos a seguir mencionando el medio, cuando los goles vengan del otro campo.