La presentación se formalizó en el estado de Nueva York en contra del grupo Bertelsmann, ya que al parecer el grupo había tomado el control de Napster con el fin de conseguir beneficios financieros.
En la demanda la discográfica expresó que las actividades que llevó adelante la empresa alemana la terminaron perjudicando como así también a todos los grupos y artistas que el sello promociona.
Además, informaron en el texto de la presentación, que la demandada invirtió "más de 85 millones de dólares en Napster para mantener el servicio de trasgresión que funcionaba violando la ley".
La presentación ante un tribunal federal de Manhattan, de Universal Music se suma a las que presentó un grupo de compositores y editores independientes contra Bertelsmann a principios de año.
Recordemos que en septiembre de 2002 un juez estadounidense rechazó la propuesta de venta de la compañía Napster al grupo Bertelsmann AG decisión que se entendió como la liquidación del sitio que permitía bajar en forma gratuita música de la web.
En junio de ese mismo año, Napster, que fue llevado a los tribunales por violar la ley de propiedad intelectual, se declaró en bancarrota para protegerse de los acreedores y evitar su desaparición y por ese motivo intentó ser comprada, pero finalmente la justicia se negó a convalidar tal operación.