Así comienzan los considerandos del decreto 737/2003, firmado por el Presidente de la Nación y Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, Néstor Kirchner que se publica hoy en el Boletín Oficial.
El decreto, de cuatro artículos y un breve considerando, dispone la instrucción de un sumario interno para determinar las sanciones que podrían caberle a estos tres altos jefes de la dictadura militar por sus declaraciones a una periodista del canal de televisión francés TV Plus, donde justificaron la desaparición de opositores al régimen.
Según el decreto, Díaz Bessone, Harguindeguy y Bignone “no pudieron razonablemente ignorar las consecuencias que necesariamente se derivarían de las conductas que respectivamente asumieron” al formular esas declaraciones que “dan cuenta de procedimientos claramente ilícitos en los que presuntamente habrían participado que endilgan al Ejército Argentino y cuya sola enunciación, constituirían prima facie un agravio a las Fuerzas Armadas y sus miembros”.
El decreto, advierte que “las conductas aludidas podrían encuadrarse en la figura prevista en el Artículo 758 segundo párrafo del Código de Justicia Militar” que prevé “degradación” y penas de hasta cinco años de prisión para “el militar que públicamente agraviare a las fuerzas armadas de la Nación, o a cualquiera de sus institutos militares, armas, cuerpos o grados”.
Además, el decreto dispone que la investigación no se limite a los militares que aparecen grabados por la televisión francesa sino “a todo el personal militar a quien se atribuye declaraciones” a la periodista Marie Monique Robin, que luego reprodujeron varios medios locales.
En el mismo decreto, también, se dispone que sea el General de Brigada Luis Alberto Pozzi el instructor del sumario. Por las mismas declaraciones, la semana pasada el abogado Ricardo Monner Sans denunció a los tres militares retirados por “apología del delito”.