Invocando la Ley de Libertad de Información (Freedom of Information Act - FOIA), el New York Times reclama al Gobierno norteamericano documentos internos, actas, papeles y hasta mensajes de correo electrónico relacionados con el cuestionado programa. La ley le daba al Departamento de Estado el plazo de 20 días hábiles para aportar la información. La demanda fue presentada el lunes pasado en un tribunal federal de Manhattan.
La reclamación por vía judicial de documentos oficiales es una práctica común en EEUU de la que hacen uno las empresas periodísticas y las ONG´s en forma más o menos habitual. El mismo diario ya había recurrido a esta práctica para conseguir documentos relacionados con la investigación de los atentados del 11 de septiembre.
Organizaciones defensoras de los derechos civiles alegan que el presidente norteamericano violó la ley que exige al gobierno obtener una autorización judicial previa para realizar operaciones de espionaje dentro del territorio norteamericano. Sin embargo la Casa Blanca argumenta que el Congreso relevó de esa necesidad a Bush como parte de las medidas anti terroristas luego de los atentados del 2001 a las Torres Gemelas y al Pentágono.
Las ONG´s también se quejan de que bajo la administración Bush se hace un uso arbitrario de las excepciones de la Ley de Libertad de Información con justificaciones que tildan de insólitas y abusos de privilegios que le permiten eludir la ley.
En el año 2003, la Casa Blanca obtuvo una nueva exención legislativa de la FOIA para todos los archivos operacionales de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA). Durante el gobierno de Bush aumentó dramáticamente el volumen de información oficial vedada al escrutinio público. Esta tendencia a la restricción se viene observando desde la administración Reagan y tuvo su pico y justificación más evidente luego de los episodios del 11 de septiembre.