Con esta abultada condena para los responsables materiales, dictada "a la luz de la lógica y la experiencia", finalizó un juicio de cuatro meses y medio y en el que fueron juzgadas 29 personas.
Los principales condenados fueron el marroquí Jamal Zougam, a quien se acusó de ser el autor material, Otman el-Gnaoui, responsable de la célula terrorista, y español José Emilio Suárez Trashorras, quien suministró los explosivos. Cada uno recibió una condena de 40 mil años por asesinato e intento de asesinato.
El juez Javier Gómez Bermúdez también condenó como miembros de una organización terrorista a los marroquines Hassan el Haski, a 15 años de prisión, y a Youssef Belhadj, a 12 años. Por otra parte, Abdelmajid Bouchar fue condenado como autor material a 18 años de cárcel y Rafa Zouhier a 10 por actuar como intermediario en la entrega de explosivos.
Otras dos cuestiones importantes se dilucidaron en el juicio. La primera fue que el principal acusado de ser el autor intelectual de los ataques terroristas nada tuvo que ver con el hecho. Se trata de Rabei Osman el-Sabed, conocido como “Mohamed el Egipcio”, quien fue absuelto. La segunda cuestión fue que la Justicia desvinculó a ETA de cualquier participación de sus integrantes en las explosiones en los trenes.
Ese punto desató toda una discusión. Apenas se produjeron los ataques el entonces presidente José María Aznar dijo que la organización separatista vasca había sido la responsable de las muertes y que su participación estaba probada. Luego se comprobó que no fue así y ahora fue ratificado por la Justicia.
Los ataques no se produjeron en cualquier momento de la vida de España. Fueron a pocos días de las elecciones presidenciales donde según las encuestas los candidatos del Partido Popular, Mariano Rajoy, y el socialista José Luis Rodríguez Zapatero (finalmente vencedor y actual jefe de Gobierno español) peleaban cabeza a cabeza.
La Justicia también fijó indemnizaciones para las personas que resultaron heridas en el ataque que van desde 30 mil a 1,5 millones de euros.
En los atentados murieron 191 personas y más de 1.800 fueron heridas. Los ataques se produjeron en cuatros trenes de la ciudad de Madrid cuando por la mañana del 11 de marzo de 2004 fueron detonadas 10 bombas de fabricación casera que estaban escandidas en bolsos. El hecho fue mundialmente conocido como el 11-M.