Con el traspaso, el Programa El Programa, creado por el decreto 606 del 22 de mayo del año pasado, tiene por objetivo “impulsar y fortalecer institucionalmente el proceso de verdad y justicia vinculado con los crímenes de lesa humanidad cometidos por el terrorismo de Estado”, marco en el cual tiene una relación especial con el Poder Judicial.
Entre otras funciones, el Consejo asesor del programa se encarga de agilizar y proteger los procesos judiciales identificar y proponer modificaciones normativas para el efectivo desarrollo de los juicios y la protección de las personas involucradas. También de garantizar la contención, protección y seguridad de los testigos, víctimas, abogados y funcionarios judiciales que intervienen en las causas judiciales o investigaciones relativas a los delitos.
Por otra parte, colabora en las investigaciones judiciales con el aporte de datos a través del fortalecimiento de “la capacidad estatal de obtener información confiable y de brindar apoyo concreto” a las causas penales en trámite.
El programa comenzó a funcionar en la Jefatura de Gabinete pero el decreto 589 del martes pasado lo transfirió al Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, a cargo de Aníbal Fernández. El traspaso incluye las unidades organizativas, los bienes patrimoniales, el personal con niveles y grados y los correspondientes niveles de Funciones Ejecutivas.
“Que, teniendo en cuenta las competencias asignadas por Ley al Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, deviene necesario transferir a su órbita el Programa Verdad y Justicia”, señala el decreto que lleva la firma de la presidenta Cristina Kirchner, Aníbal Fernández y el jefe de Gabinete, Alberto Fernández.
Cuando Cristina Kirchner asumió la presidencia transfirió al Ministerio de Justicia la Secretaría de Seguridad Interior y las competencias sobre las fuerzas de seguridad nacionales (la Gendarmería Nacional, la Prefectura Naval Argentina, la Policía Federal, y la Policía de Seguridad Aeroportuaria). Esas funciones estaban a cargo del Ministerio del Interior, comandado por Aníbal Fernández, quien se llevó consigo las tareas a su nueva función.
En ese marco, el nuevo decreto también reformula la composición del Consejo Asesor del programa de donde fueron relevados los representantes del Ministerio del Interior. La función del Consejo es asistir al Coordinador del Programa para asegurar una adecuada implementación de sus acciones, en relación con las tareas que cada uno de los organismos involucrados debe llevar adelante para su ejecución.
Cuando se creó, el Consejo Asesor estaba integrado por dos representantes, uno titular y otro suplente, de la Jefatura de Gabinete, del Ministerio de Justicia y del Ministerio del Interior. “Atento a que han dejado de pertenecer al ámbito del Ministerio del Interior las Fuerzas Policiales y de Seguridad, así como los cometidos vinculados con la seguridad interior, la presencia de representantes de dicha Cartera de Estado en el Consejo Asesor del Programa resulta innecesaria”, señala el decreto.
Los cargos que dejó esa cartera, no fueron reemplazados por otro organismo.