Insulza disertó sobre “La Justicia en las Américas” en el marco de la Conferencia de las Cortes Supremas de la región, que convocó a magistrados de Argentina, Brasil, Chile, Uruguay, Bolivia, Paraguay, Ecuador, Guyana, Haití, Santa Lucía, Trinidad y Tobago, Costa Rica, Colombia, Nicaragua, México, Guatemala, Estados Unidos, Canadá, Panamá y Perú.
En una sala casi llena y ante las cámaras de TV, el chileno se mostró satisfecho porque, según él, “nunca el continente tuvo tantos gobiernos democráticos”. En ese sentido, mencionó que de la última Cumbre de las Américas en Trinidad y Tobago participaron 34 mandatarios de la región, una cifra record.
Pero aunque destacó esos logros, no pudo evitar referirse al golpe de Estado en Honduras al que calificó como un “retroceso”. “Lo que acabamos de ver en Honduras es una involución; un jefe de Estado (Manuel Zelaya) echado de su país…Eso no puede ocurrir más”, enfatizó Insulza.
El mandamás de la OEA señaló que la Carta Democrática Interamericana, suscripta el 11 de septiembre de 2001 en Washington, postuló tres premisas sobre la democracia: la primera referida a la generación de poder; la segunda sobre los derechos del individuo y la última acerca de la República.
Con respecto a la generación de poder, Insulza dijo que “no hay democracia sin libertad de expresión y añadió que no le gustan “las democracias con apellidos”. En relación con los derechos del individuo señaló: “Uno gestiona el Estado para beneficio de los ciudadanos”.
Pero enfatizó en que el desafío para la región pasa por fortalecer la República y las instituciones.
El mandatario de nacionalidad chilena calificó a la pobreza como uno de los principales problemas de la región y señaló que es una “paradoja” que una región “que no es pobre tenga tantos pobres”.
En ese sentido, aseguró que más del 70 por ciento de los secuestros alrededor del mundo se cometen en América latina donde, además, prolifera el “crimen organizado, el narcotráfico y los problemas medioambientales”.
La disertación de Insulza estuvo precedida por la apertura de la Conferencia, a cargo del presidente de la Corte Suprema de Justicia, Ricardo Lorenzetti, que aseguró que “este encuentro es para reflexionar sobre cómo mejorar los poderes judiciales para poder servir a los pueblos”.
“Los pueblos piden celeridad, y esto no tiene que ver con el expansionismo del Poder Judicial sino con la eficiencia de éste”, indicó Lorenzetti.