Sin embargo, los camaristas no hicieron lugar a la recusación de Grecco, pedida por la defensa de Redrado. Fuentes judiciales consultadas por DiarioJudicial.com indicaron que si hubiera acuerdo entre los dos camaristas para emitir una decisión unánime, no sería necesario convocar a un tercer juez.
Los camaristas Buján y López Castiñeira indicaron en su resolución que el hecho de que Grecco hubiera recibido este sábado a las 14 en su despacho un escrito “no autoriza a considerar al magistrado recusado en la causal de recusación prevista en el inciso 2º del artículo 17 del Código Procesal”.
Y añadieron que su actuación “por sí sola, no revela que Grecco tenga interés directo o indirecto en el pleito como dogmáticamente se afirma” en el escrito presentado por los abogados de Redrado.
Los camaristas que quedarán a cargo de la causa por el despido por decreto de Redrado señalaron en su resolución de este martes que las opiniones jurídicas que pudiere haber emitido Grecco “no configura(n) la causal de prejuzgamiento contemplada en el inciso 7º del artículo 17”. La Sala de Feria tampoco hizo lugar al planteo de nulidad.
Por otra parte, este martes la jueza María José Sarmiento convirtió, tal como lo hizo este lunes con la causa por el uso de las reservas del Central, en juicio sumarísimo (ordinario) la causa por la remoción de Redrado. Al igual que la resolución de ayer, la sentencia de este martes tuvo un solo párrafo.
En tanto, este mediodía el Gobierno le pidió a la Sala de Feria en lo Contencioso Administrativo que interviniera por “superintendencia” en los expedientes en los que la jueza Sarmiento resolvió paralizar la constitución del Fondo del Bicentenario y reponer al frente del Banco Central a Redrado. Ello constituiría un virtual “per saltum” aunque sin llegar a la Corte Suprema.
Al cierre de esta edición, la Cámara aún no se había pronunciado sobre este tema.
Hasta la resolución de la Sala de Feria de la Cámara que aceptó la excusación de Grecco para intervenir en la causa de Redrado, la noticia que ocupó los titulares fue la decisión de la justicia estadounidense que embargar las cuentas que el Banco Central tiene en la Reserva Federal norteamericana.
La decisión fue adoptada por el juez Thomas Griesa, a cargo de la causa iniciada por la demanda de bonistas que no entraron al canje de deuda de 2005 (holdouts) y que, por lo tanto, tienen en su poder bonos que permanecen en default (en total, hay bonos por unos 20.000 millones de dólares en esa situación).
El embargo de cuentas era reclamado hace tiempo por los bonistas, pero el juez Griesa se había denegado con el argumento de que las reservas del BCRA no eran del Tesoro sino de una entidad autónoma.