“Deciles no a los inmigrantes ilegales, no a la cumbia y al reguetón de mierda que pudre la cabeza, no a las putas drogas, no a los antipatria, no al anarquismo, no al comunismo, no al capitalismo, no al sionismo, sí a la bandera, sí a los skins, si a Perón”, reza un mensaje del grupo Nacional Socialismo Argentino que cuenta con 285 miembros.
En diálogo con DiarioJudicial.com la abogada del Inadi Córdoba, Liliana Splenger, aseguró que “es difícil identificar a los responsables de la red social”. La letrada aseguró que se trata de un delito informático y en ese sentido habrá que ver si lo investiga la justicia federal o la ordinaria.
En Internet, los integrantes del foro pidieron “cerrar las fronteras” y “matar a todos los peruanos y bolivianos que vienen a robar a la Argentina”. También había fotos de Hitler y cruces esvásticas.
A fines de 2009, Córdoba también había sido noticia por otra amenaza virtual, esta vez proferida por un miembro del Consejo Profesional de Ciencias Económicas. “A todos los gays habría que ahorcarlos... sin asco”, dijo Hugo Federico Ebeling.
Su frase apareció en un foro que creó, el 26 de noviembre último, el usuario Pablo Montiel para evitar que la Justicia iraní condenara a muerte al joven gay Nemat Safavi por mantener relaciones sexuales con otro hombre.
Ebeling fue el primero en opinar. El hombre, de 64 años y vicepresidente de la Comisión Asesora de Informática del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de esta provincia dijo ser amante de la “caza mayor, el tiro deportivo, la informática y el automovilismo”.
Frente a ese panorama, la titular del Inadi local, Adriana Domínguez, y Splenger intimaron por carta de documento a Ebeling a que se presentara en la oficina del instituto contra la discriminación en Córdoba. El hombre se excusó porque debía tomarse sus vacaciones, pero el 4 de enero Domínguez le manifestó que debía retractarse o reafirmar sus “dichos discriminatorios”. Entonces Ebeling concurrió al Inadi y se disculpó.
Según el Inadi, Ebeling adujo sus escritos en Internet a un “brote insulínico, ya que que él es insulinodependiente porque es diabético”. “Las disculpas son irrisorias al lado de lo que escribió”, expresó Domínguez.
Consultada por este diario en relación con las acciones a tomar en este caso, Splenger dijo que el Inadi esperará que la filial cordobesa de DAIA responda si está conforme con las disculpas de Ebeling. En caso contrario, la causa podría seguir su camino en los tribunales.