En las audiencias se juzgará a un hombre de 31 años, acusado de abusar sexualmente y estrangular a la hija de su pareja, una nena de 12 años, un hecho de enorme conmoción pública, ocurrido en julio de 2009 en un barrio periférico de la capital provincial.
El Tribunal estará integrado por los jueces Norberto Nisnevich, Dardo Rosciani y Cristian Fiz.
Los magistrados abordarán un hecho de homicidio y abuso sexual agravado por el vínculo, de acuerdo con la reforma del Código Procesal, que introdujo esa modalidad de proceso. Habrá tres días de deliberaciones. Las audiencias están previstas para los días, 11, 12 y 14 de mayo, a partir de las 9.
Las sesiones se desarrollarán en la sala de audiencias de la Cámara de Apelaciones en lo Penal. Luego de dos días de audiencias, la fiscalía, los querellantes y la defensa expondrán sus alegatos el viernes próximo. La sentencia aún no tiene una fecha precisa.
El desarrollo del debate transcurrirá en la reformada sala de audiencias de la Cámara de Apelaciones en lo Penal, que se encuentra en el primer piso de los Tribunales de Santa Fe. Esa sala fue especialmente acondicionada por la Corte Suprema de Justicia: las nuevas normas que rigen el debate prevén que todo sea registrado a fin de que, en caso de ser recurrido el fallo, sea la Cámara Penal la que lo revise.
El debate comenzará con la apertura que efectuará el presidente del tribunal, Cristian Fiz, y los alegatos por parte de la fiscalía, la querella y defensa técnica. Luego se dará la palabra al imputado, quien declarará o se abstendrá, y finalmente se recibirán declaraciones testimoniales de los distintos testigos propuestos por las partes.
Finalmente, el viernes 14, la fiscalía, la querella y el defensor formularán sus alegatos, quedando a cargo de los magistrados el dictado de la sentencia en días posteriores.
La única limitación de asistencia a las audiencias está dada por la capacidad de la sala, pero no existe impedimento alguno para la asistencia del público en general a estas audiencias, teniendo en cuenta que existen lugares reservados para los familiares de la víctima, del imputado, y para los medios de prensa.